#LaVozDeLosExpertos
Este mundo genera relaciones y vínculos espectaculares. Ninguno lo he formado y mucho menos nutrido gracias a Facebook. Ahora lo llamaré “Los Hombres de Gris” con relación a la novela de Ende, Momo. Lo único que le agradezco es que haya sido un canal de reconexión con una persona que significa muchísimo en mi vida. Después de reconectar hacíamos todo a espaldas de los Hombres de Gris, hasta que compraron Instagram.
En México, Tierra Inaudita. Relatos de un país inimaginable, escrito por la precisa pluma de Aníbal Santiago, una de las historias cuenta la mañana después de los 15 de Rubí. Este libro lo bajé a mi Kindle tras ver que dos personas que conozco, ¡gracias a la vida!, en persona, lo leían (lo publicaron en Instagram). En el relato, por supuesto que se menciona la invitación abierta al mundo que hace el padre de Rubí a través de Los Hombres de Gris.
La fiesta fue un fenómeno que contaminó un llano seco que supo ser una represa que regaba praderas y alimentaba a las familias de un pueblo de personas sin seguro social que cargan muchas piñas para hacer mezcal.
Lo anterior lo veo como parte de los efectos obvios de la tecnología cuando alguien no sabe utilizar su dispositivo móvil o pone mal las configuraciones de distribución de una invitación a una fiesta de quince años. Sin embargo, el problema es más profundo...
El más orgulloso de Los Hombres de Gris creó un sistema de espionaje hace 15 años y su gran secreto es que era un “chismógrafo” tan llamativo que todos fuimos corriendo a poner nuestros datos, correos de universidad, primeros empleos y fechas importantes.
Con el tiempo Los Hombres de Gris eran las amables personas que nos informaban los cumpleaños de los amigos y nos daban fotos para enviarles. Al ver que eran exitosos empezaron a organizar nuestras fiestas y pedirnos fotos de ellas para compartirlas con los asistentes y, en especial, con quienes no asistieron.
Seguían siendo exitosos con sus planes y se prestaron a ser los que pasarían nuestros mensajes, como papelitos escritos en la escuela, viéndolos pero haciendo como que no. Sabían bien de qué banca a qué banca iban, el color del papel, el perfume de quien escribía, la tinta, la presión con la que se hizo el signo... Whatsapp e Instagram con: significado, significante y el mensaje del medio, acompañado de hermosos metadatos.
Las empresas de Silicon Valley tienen el tema de género masculino dominante y de tez blanca dominante como grupo de control. Estos Hombres han visto oportunidades en la libertad del canal, en mensajes de protección, y en que satisfacer el deseo del hoy permite que se regalen las memorias del ayer y las métricas para poder hacer los escenarios del mañana. Aunque muchos vean #ruidoblanco alrededor de esta materia gris, la realidad es que el problema es la absoluta falta de transparencia en el uso de nuestras historias personales mientras que Los Multimillonarios Hombres de Gris juegan al brinco entre paraísos fiscales.
Hacen el dinero al poner un anuncio junto a la foto de nuestra primera ducha, de nuestro primer partido, del quinto cumpleaños del sobrino. ¿Hay forma de detenerlos? Me parece que la hay, pero el tema no es la acción, sino la inacción, y Los Hombres de Gris se alimentan de esa inacción con el paso del tiempo.
Como diría Michael Ende: “existe una cosa muy misteriosa, pero muy cotidiana. Todo el mundo participa de ella, todo el mundo la conoce, pero muy pocos se paran a pensar en ella. Casi todos se limitan a tomarla como viene, sin hacer preguntas. Esta cosa es el tiempo”.
Mientras tanto, en México… Paco, Beatriz y Andrés han anunciado el Plan Nacional de Lectura. Me emocioné al escuchar hablar de libros baratos, gratuitos y facilidad al acceso literario… pero, me faltó escuchar audiolibros y/o libros digitales.
Si Los Hombres de Gris se enteran de que alguien quiere que los mexicanos aprovechen su tiempo leyendo en vez de jugando, algo puede pasar. La mejor forma de erradicar a estos Hombres de Gris podría ser dando versiones digitales para formato móvil, perfecto para los desgastados bolsillos de muchos mexicanos, en terminales de camiones y estaciones de transporte público. #programanacionaldelectura.