¿No que los independientes limpiarían la política?

La presentación que hizo ayer el consejero del INE, Benito Nacif, sobre la revisión de firmas de candidatos independientes a diputados federales revela dos datos que son tan relevantes como vergonzosos: sólo uno de los 65 aspirantes sometidos a revisiones mediante muestra aleatoria no tenía firmas falsas, y 25 de los 28 a los que se auditó la totalidad de las firmas fueron descalificados.

Desagreguemos los datos para mejor comprensión:

Doscientos cuarenta ciudadanos(as) manifestaron ante el INE su intención de buscar una candidatura independiente para diputado federal. De ellos, 187 cumplieron con los requisitos administrativos para ser aspirantes y darse a la tarea de recabar firmas equivalentes a dos por ciento del padrón de su distrito electoral, dispersadas en la mitad más uno de las secciones que lo conforman. Solamente lo lograron 65 que, de acuerdo con la ley, ya estaban en condiciones de ser candidatos independientes.

Sin embargo, se denunció y se ofrecieron pruebas de firmas falsificadas, lo que obligó a la autoridad electoral a someter a auditoría a esos 65 aspirantes. Se seleccionaron aleatoriamente muestras de las firmas. Si el porcentaje de las no válidas se estimaba insuficiente para alterar el cumplimiento del requisito, se dio paso a quienes encajaban en ese escenario. Pero en los casos en que el porcentaje resultaba tal que de ninguna manera se podría lograr el requisito, entonces se revisó firma por firma.

Veintiocho fueron los aspirantes sometidos a la auditoría de la totalidad de sus firmas y, de ellos, sólo tres superaron la revisión. Los otros veinticinco fueron descalificados. De manera que, de los 65 revisados, solamente 40 serán candidatos independientes, lo que no significa que esos participantes no hayan presentado firmas irregulares. Sólo uno, ya lo decíamos, hizo las cosas como se deben  hacer.

Ya se conocerá su nombre al cotejarse la lista ya conocida de los 65 con los distritos correspondientes y también el de los tramposos descalificados.

Falta por ver lo que ocurra con quienes aspiran a la candidatura presidencial independiente. Todo parece indicar que estarán en la boleta Jaime Rodríguez, El Bronco, Margarita Zavala y Armando Ríos Pitter, El Jaguar, a menos que prospere la propuesta de éste último de unir fuerzas y presentar sólo a uno, el mejor posicionado, para mejorar su preferencia electoral con la suma de los tres que, de acuerdo con la más reciente encuesta publicada por EL UNIVERSAL, apenas alcanza siete por ciento.

A diecisiete días de que venza el plazo para cumplir con los requisitos de ley, El Bronco ya rebasó las 866 mil firmas exigidas, equivalentes al uno por ciento del padrón electoral nacional. Es más, ha rebasado la cantidad en 20% y sus estrategas dicen que buscará llegar hasta 30% más como colchón de firmas que eventualmente compensen las que no le sean reconocidas. En cuanto a la dispersión del uno por ciento del padrón en al menos 17 estados, el ex gobernador de Nuevo León ya alcanzó 22 entidades.

Margarita Zavala podría estar logrando este fin de semana el total de las 866 mil firmas requeridas, pues lleva hasta ahora 848 mil 780. La dispersión ya la logró en 14 estados, de manera que le faltan tres para completar los obligatorios.

A su vez, El Jaguar ya obtuvo la dispersión en los 17 estados, pero le falta completar la totalidad de firmas, requisito en el que cuenta con 806 mil 852; es decir, le faltan poco menos de 60 mil.

Faltará ver la validación de las firmas por parte del INE, respecto a la cual ya hay algunos datos a la fecha: no han sido validadas 40% de las firmas de El Bronco, 36% de las de El Jaguar y 35% de las de Margarita. Pero en ese cuadro hay datos extremos: a Marichuy Patricio Martínez, del EZLN, sólo le han invalidado 7%; a Pedro Ferriz De Con, 60%, y a Edgar Portillo (quien por cierto está en el cuarto lugar en cuanto a firmas recabadas), el 93%.

Con estos datos la situación es clara: todos los aspirantes a candidatos independientes han incurrido en irregularidades, por decir lo menos, en la recaudación de sus firmas. Reproducen las trampas de los partidos. Por eso la pregunta: ¿no que las candidaturas independientes vendrían a limpiar el ambiente político del país?