Ve el PRI a AMLO como amenaza nuclear
Dentro del propio PRI ya algunos se preguntan qué tan efectiva estará resultando la estrategia del presidente del partido, Enrique Ochoa Reza, de realizar casi a diario ataques directos contra Andrés Manuel López Obrador. Ayer nuevamente arremetió contra AMLO y dijo que tanto éste como su partido, Morena, apoyan abiertamente el régimen de Corea del Norte y de Venezuela, y que ése es precisamente el modelo político y económico que ven positivo para México. Priístas dicen que no está mal el ímpetu de don Enrique, sin embargo, advierten que repetirlo tanto y tan seguido podría ocasionar que este tipo de comparaciones pierdan efecto. Ochoa, seguramente, tendrá medido el efecto de estas críticas y estará siguiendo los consejos de sus expertos en comunicación. Sin embargo, lo que es evidente es que el mensaje que están enviando es que perciben a López Obrador como una amenaza nuclear para las elecciones de 2018, similar a la que hoy en día representa Corea del Norte con sus ensayos con misiles nucleares.
Crece el número de “rebeldes” en el PAN
El jueves pasado, seis senadores de los denominados “rebeldes” lamentaron que, en la búsqueda del poder, su dirigente nacional, Ricardo Anaya, haya dejado de lado la agenda legislativa blanquiazul, para dar prioridad a la del denominado Frente Ciudadano por México. Ayer los panistas le hicieron un guiño al celebrar que su coordinador Fernando Herrera pusiera sobre la mesa el tema de la Ley de Seguridad Interior, que no había sido considerado. Hasta ahí todo bien, pero la novedad es que ya no son seis los senadores “rebeldes”, sino que ahora se trata de nueve, pues se sumaron los senadores José María Martínez, Octavio Pedroza y Fernando Torres Graciano. Según los legisladores afines al coordinador de los senadores panistas, Ernesto Cordero, poco a poco irá creciendo el número de legisladores que entren en rebeldía contra los designios del jefe nacional de su partido.
No es desconfianza pero…
Las finanzas de la, cada vez más pequeña, bancada del PRD en el Senado, están bajo la lupa. Nos dicen que el coordinador parlamentario perredista, Luis Sánchez Jiménez, giró instrucciones para que la parte administrativa haga una escrupulosa revisión de los “debes y haberes” de la fracción que fue dirigida por la ex perredista Dolores Padierna. Nos cuentan que no es que don Luis desconfíe del manejo económico que dio doña Dolores al grupo, sino que ante la salida de varios legisladores, las arcas tienen menos recursos. Nos dicen que su principal preocupación en este tema es que los recursos del PRD se usen de manera adecuada.
El control remoto de Bejarano y Padierna