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AMLO y Norcorea, ¿amor del bueno?
De Alberto Anaya, dirigente y dueño del Partido del Trabajo, no hay duda de su afinidad con el régimen de Kim Jong-un, porque no tienen reparos en invitar a Corea del Norte a sus actos políticos. Pero llama la atención que, tras la declaratoria oficial de persona non grata al embajador norcoreano Kim Hyong Gil por parte del gobierno mexicano, los morenistas Ramón Jiménez López y Ana Juana Ángeles Valencia, ex candidato a jefe delegacional en Gustavo A. Madero y diputada en la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, se solidarizaron ayer con don Kim Hyong Gil. Ambos acudieron a la representación de esa nación asiática y arroparon al diplomático, quien dio un posicionamiento tras su expulsión por las constantes violaciones de su país a las resoluciones de la ONU, al realizar pruebas atómicas. ¿Jiménez López y Ángeles Valencia habrán acudido con la representación y permiso de Andrés Manuel López Obrador o saldrán a justificarse con la ya conocida respuesta de que su presencia fue “a título personal”?
Paran chapuliniza en el PRI
Los chapulines estaban que brincaban de contentos. Pero no crea que alguna especie del mundo animal, sino los políticos en el PRI que se la viven saltando de una cámara a otra en el Congreso por la vía plurinominal, es decir, sin someterse al juicio ciudadano (es un decir) que les dé su voto. Ayer el INE “revivió” de última hora el candado antichapulines en el PRI, que prohíbe saltar de un cargo plurinominal a otro de forma consecutiva. El priísta Ulises Ruiz Ortiz publicó ayer un desplegado en el que arremetió contra los consejeros del INE que en comisiones habían avalado dar vida a los chapulines. De plano acusó a los consejeros Marco Antonio Baños y Benito Nacif de ser los orquestadores del complot, por lo que confió en que el pleno de consejeros les enmendara la plana. Y sí, al final del día, en la sesión de Consejo General, terminaron dando la razón a Ulises Ruiz, y ahora la fauna no tendrá la oportunidad de brincar felizmente y sin ataduras de cámara en cámara.
Cordero, ¿come cordero?
Este viernes, los presidentes de las Cámaras de Diputados y de Senadores, el priísta Jorge Carlos Ramírez Marín y el panista Ernesto Cordero, tuvieron un primer encuentro para definir métodos y agilizar el trabajo legislativo. Comieron en un restaurante del centro de la capital y hasta ese lugar llegó a comer el también senador, Miguel Barbosa, acompañado de su esposa Charito. Nos dicen que el ahora integrante del PT-Morena quiso pagar la cuenta de sus compañeros legisladores, pero no aceptaron. Por cierto, el priísta yucateco saboreó un arroz con mariscos y Ernesto Cordero un cordero al pastor. ¡Ah, caray!
Juchitán, abandonado por presidentes
La última vez que un presidente de México estuvo en Juchitán fue en 1989. Gobernaba Carlos Salinas de Gortari. Le siguieron Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón. Ninguno pisó tierras juchitecas. Hasta ayer, que el presidente Enrique Peña Nieto fue a ofrecer respaldo a los oaxaqueños, en particular en Juchitán, uno de los lugares más castigados por el sismo de 8.2 grados del jueves. Los juchitecos, nos comentan, reconocieron el respaldo, después de 28 años que no los visitaba un jefe del Ejecutivo federal.
***En la foto: Andrés Manuel López Obrador (FOTO: ARCHIVO EL UNIVERSAL)