El final del mundo laboral tal como lo conocemos es un hecho. Este 2018, el Foro Económico Mundial dio a conocer que 52% de las tareas profesionales más comunes serán remplazadas por máquinas. La proliferación de tecnologías de información generó un ecosistema en el que la digitalización, la inteligencia artificial, la robotización y la realidad aumentada resuelven buena parte de lo que antes hacían personas. Muchas empresas en el mundo anuncian despidos masivos apoyándose en la automatización de procesos. Y es apenas el comienzo.
Pero antes de entrar en pánico, vale la pena detenerse en las ventajas que ese fenómeno trae consigo. Ante una población que llega a la edad de retiro y que vivirá muchos años más, con un número insuficiente de jóvenes para solventar esas jubilaciones, la automatización puede ser la respuesta. En muchos países ya es parte de la solución.
Conceptos clave de Recursos Humanos se dirigen hacia la extinción y no son pocos los síntomas. Las formas de contratación conocidas se desmoronan porque el personal negocia por respeto, dignidad, flexibilidad, colaboración, compromiso social, actividades y proyectos fuera de la oficina. El capital humano de esta generación detesta los inconvenientes del empleo de tiempo completo. Espera ser un agente libre, dueño de los medios de producción actualmente más valiosos como el talento, la creatividad, el empoderamiento y el tiempo.
Se trata de un nuevo paradigma para el que hay que prepararse y en México vamos tarde. ManpowerGroup, firma global que contrata personal, lleva una década hablando de la escasez de talento a pesar de los millones de candidatos disponibles. Algunas instituciones educativas han adaptado sus cursos para atender estas necesidades, pero son las menos. La capacitación que reciben muchos de nuestros niños y jóvenes no es la adecuada. Hay que modificar profundamente los planes de estudio para evitar que sigan dedicando años a aprender cómo lidiar con una realidad que ya no existe.
HUERFANITO. “La innovación no se sentará a esperar que nosotros estemos listos.” Valeria Moy, directora de México ¿cómo vamos?