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La Selección Mexicana se presenta en el Alfonso Lastras, que albergará un juego eliminatorio después de 12 años de no hacerlo. En el lejano 2005, La Volpe y compañía golearon a Guatemala en territorio potosino, pero... ¿Cuál fue la razón por la que los muchachos de Osorio pisarán la cancha del Atlético San Luis?
Sabiendo que la Selección es un imán de turismo y proyección nacional para su población, el Gobierno Estatal gastó 1.5 mdd para traer a los aztecas. El equipo tricolor funciona como una banda de rock, quien quiera llevarlo, tiene que pagar como tal.
El gobierno de Nuevo León no quiso entrarle a la oferta para llevar este partido a la cancha de Rayados, cuando tuvieron la posibilidad.
El caso Honda. No sólo la lesión con la que arribó al futbol mexicano ha impedido a Keisuke Honda estar al cien por ciento con el Pachuca. Si bien es cierto que el japonés lo ha hecho bien en los partidos que ha participado con los Tuzos —anotando dos goles en pocos minutos—, su adaptación ha sido complicada.
Con sus compañeros habla poco, la diferencia en el idioma es impedimento fuerte, el más pegado al japonés es Omar González, quien gracias al manejo del inglés sirve de intérprete a su técnico y el resto del plantel, su español es nulo y son pocos los pupilos de Diego Alonso que manejan el idioma del Tío Sam.
Honda practica con su entrenador personal, la disciplina propia de su país no la deja a un lado, es el primero en llegar, es el más puntual, el último que se va, pero no logra adaptarse a los Tuzos.
futbol@eluniversal.com.mx
Sabiendo que la Selección es un imán de turismo y proyección nacional para su población, el Gobierno Estatal gastó 1.5 mdd para traer a los aztecas. El equipo tricolor funciona como una banda de rock, quien quiera llevarlo, tiene que pagar como tal.
El gobierno de Nuevo León no quiso entrarle a la oferta para llevar este partido a la cancha de Rayados, cuando tuvieron la posibilidad.
El caso Honda. No sólo la lesión con la que arribó al futbol mexicano ha impedido a Keisuke Honda estar al cien por ciento con el Pachuca. Si bien es cierto que el japonés lo ha hecho bien en los partidos que ha participado con los Tuzos —anotando dos goles en pocos minutos—, su adaptación ha sido complicada.
Con sus compañeros habla poco, la diferencia en el idioma es impedimento fuerte, el más pegado al japonés es Omar González, quien gracias al manejo del inglés sirve de intérprete a su técnico y el resto del plantel, su español es nulo y son pocos los pupilos de Diego Alonso que manejan el idioma del Tío Sam.
Honda practica con su entrenador personal, la disciplina propia de su país no la deja a un lado, es el primero en llegar, es el más puntual, el último que se va, pero no logra adaptarse a los Tuzos.
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