Este fin de semana se realizará el Grand Prix de Natación Junior en la Universidad Autónoma de Nuevo León, una competencia cuya convocatoria salió hace no más de un mes y el cupo, según la Federación Mexicana de Natación , es de mil nadadores de las categorías 11-12, 13-14, 15-16 y 17-18 años.

El objetivo, queda claro, es recaudar recursos para las arcas de la Federación, ya que desde que terminaron los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe a la fecha, no le ha dado un solo centavo a los nadadores para eventos de preparación y seguimiento en lo que se refiere al ciclo olímpico. Sin embargo, la natación de México —en todo lo correspondiente a la participación y afiliación—, le ha dado casi el 80% de sus ingresos totales, números más fuertes en comparación con las otras disciplinas acuáticas que se practican en nuestro país.

No ha habido apoyo para nuestros mejores nadadores y desafortunadamente, solo voltean a las albercas de competencia para ver el negocio, como en esta ocasión, en la que el hecho de tener mil competidores les dejará una derrama de entre 800 mil y un millón de pesos por concepto de inscripción a las pruebas individuales y de relevos. Es decir, solamente buscan obtener dinero con estas competencias.

Para este evento, fue tan nefasta su convocatoria, que su idea o el gancho para que los atletas se inscribieran, fue que los nadadores que no dieron marca para Olimpiada Nacional en otras justas, lo pudieran lograr en este Grand Prix Junior. Sobre todo después de lo sucedido en el pasado Campeonato Nacional de Curso Corto (que se llevó a cabo en diciembre), en el que muchos nadadores ya no participaron en los últimos días debido a las malas condiciones de la alberca en Zapopan. Es decir, encontraron cómo hacer negocio de su negligencia con otro clasificatorio.

Lo más penoso del asunto es la falta de criterio en el tema de las clasificaciones a la Olimpiada Nacional , a la que no podrán ir grandes nadadores como Billy Cruz, Athena Meneses, entre muchos más, por el simple hecho de que no irán a Nuevo León, ya que diez días después tienen que estar en Tijuana para el selectivo a los Juegos Panamericanos. Estos atletas no podían darse el lujo de ir a nadar en una competencia y en 15 días hacerlo en la otra, en la que definirían si pueden ser parte de la selección para Lima 2019 o para el Campeonato Mundial Junior.

Está claro que este torneo no era conveniente técnicamente. Es triste que la FMN no vea por el desarrollo de sus nadadores, sino por lo que pueda generar de dinero para beneficio de unos cuantos. Muchas incongruencias, ojalá la Conade hiciera algo para que a esos nadadores por su calidad, les tomen en cuenta los tiempos que hagan en Tijuana para la Olimpiada Nacional.

En verdad les pregunto: ¿Cuál es el problema de que les tomen el tiempo de Tijuana ?, es lo mismo, si hacen las marcas necesarias deberían tener la posibilidad de estar en la ON. Sin embargo, pareciera que solamente quieren que vaya mucha gente para satisfacer su hambre de dinero.

deportes@eluniversal.com.mx

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