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Sábado por la noche, función de boxeo, el mejor peleador mexicano del momento estelariza la cartelera, puente y fin de semana patrio; mejor, imposible.
Y corre la cuenta regresiva para que todos sepamos de boxeo y apantallemos a los cuates con un par de datos “mamalones” sacados de la web o replicados.
De hecho, se sabe tanto de este deporte que sin importar cuál sea el resultado del pleito, muchos ya tendrán su conclusión hecha.
Mire: si por alguna razón llega a perder Saúl Canelo Álvarez, sin importar las formas y las vías; decisión, KO, TKO, etcétera, entonces se recargarán en el viejo cuento de que es un boxeador fabricado y sin calidad, lleno de promoción y nada más. Si gana y lo hace de manera contundente, entonces se espera un gran incremento en el porcentaje de aquellos que dirán: “yo siempre supe que este muchacho sería grande”, pero otros seguramente optarán por el descrédito cuestionando la diferencia de edades. Y ya ni hablemos de una victoria apretada, porque entonces se estará hablando de un fraude y de una pelea arreglada.
Las críticas han sido desmedidas con Canelo, si bien es cierto recibió un gran empuje de imagen y marketing para despegar, cierto también es que por méritos propios y de su equipo de trabajo, ha llegado a ser uno de los peleadores más reconocidos a nivel mundial, y eso no se logra sin talento y capacidad.
Tiene apenas 27 años y se ha enfrentado a los mejores; sí, perdió con Floyd Mayweather Jr., pero el mismo resultado tuvieron 48 boxeadores más cuando se
midieron con él (y digo 48, porque el circo contra Conor McGregor no cuenta, al menos para mí), con el resto, y no son pocos: Miguel Cotto, James Kirkland, Erislandy Lara, Alfredo Angulo, Austin Trout, Shane Mosley, por mencionar algunos, Canelo salió con los brazos en alto, pero con toda clase de cuestionamientos.
Todo lo inverso para Gennady Golovkin, que si uno revisa el historial de contendientes, encontrará más y mejores nombres del lado del mexicano.
Canelo ha mejorado cada combate; no se requiere de mucho para entender que su boxeo es más variado, tiene mejores combinaciones, se mueve mejor y se defiende con inteligencia, aunque dicen los que saben que su rendimiento baja considerablemente después del sexto round, pero repito, tiene apenas 27 años y a su carrera aún le faltan cientos de rounds.
Pienso que veremos uno de los mejores combates en años, el estilo de ambos se presta: tienen todo para que así sea, además, cada uno encuentra en esta función una gran oportunidad para dar un golpe de autoridad y credibilidad, que dicho sea de paso, de eso necesita bastante el boxeo.
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