Dustin Johnson
navegaba con el clima perfecto y las olas a su favor. Sólo debía guiar el barco para llegar a tierra firme y escribir su nombre con letras doradas. Y así lo hizo. La ventaja que tomó el sábado, de cuatro golpes, fue suficiente para coronarse en el World Golf Championship México Championship , con una tarjeta final de 263 golpes y un total de 21 bajo par.
Rory McIlroy
venía en la segunda posición y esperaba un milagro para volver a una victoria, que no tiene desde hace poco menos de un año. Ayer jugó agresivo para tratar de recortar distancias, pero no fue suficiente ante el gran golf que Dustin nos mostró a lo largo de los 18 hoyos finales.
Johnson hace historia en nuestro país, no sólo porque ganó por segunda ocasión el WGC México Championship , sino también porque consiguió entrar al selecto grupo que ostenta 20 o más victorias en el tour de la PGA y acompaña a nombres como Sam Snead, Tiger Woods, Jack Nicklaus, Arnold Palmer y Phil Mickelson, entre otros históricos que lo han logrado.
El evento hizo historia por sí mismo. Las gradas del Club Chapultepec estuvieron a su máxima capacidad desde el miércoles hasta el día final, ayer. El comportamiento del público fue extraordinario; una vez más, nos dimos cuenta de lo que podemos ser capaces los mexicanos cuando nos unimos, teniendo eventos de talla internacional, superando todas las expectativas. Los ojos del mundo estuvieron puestos una vez más en nuestro país, en el mejor torneo de Latinoamérica.
Tuvimos por primera vez a Tiger Woods jugando en México, algo que pocos países tienen el privilegio de contar, porque el mismo Tigre nos enseñó el arte que hay en sus manos para manejar la bola, luego de ese golpe en el bunker del hoyo 9, que seguramente la historia nos lo recordará a cada instante. En fin, ayer se hizo historia y fue gracias al deporte, a la gente, a los organizadores y —sobre todo— al golf.