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Efecto “amlove” invade al gobierno de Jalisco
El llamado efecto “amlove”, nos platican, está pegando fuerte entre la clase política de Jalisco, para ejemplo, los gobernadores en funciones, Aristóteles Sandoval Díaz (PRI), y el electo, Enrique Alfaro Ramírez, quienes presumieron sin empacho su “buena relación” con Andrés Manuel López Obrador. Nos hacen saber que, tras una reunión que ambos mandatarios tuvieron con el presidente electo, los dos jaliscienses, cada uno por su lado, no perdieron la oportunidad de enviar a todos los medios fotos con don Andrés y comunicados que destacan su buena relación con éste. Así, nos mencionan, es como don Enrique ha preferido dejar en el olvido los tiempos de campaña en los que el tabasqueño lo llamaba traidor y ahora asegura que su relación con el jinete de la “cuarta transformación” es tan buena, que no necesitará tocar puertas a través del próximo coordinador del gobierno federal en el estado, Carlos Lomelí, a quien de plano se niega a reconocer como interlocutor. Veremos, nos dicen, cuánto dura la luna de miel.
Circula Tren Maya por rieles de utopía
En Chiapas, nos dicen, el anuncio del proyecto del Tren Maya, propuesto por Andrés Manuel López Obrador, se desliza sobre algunos rieles de utopía, pues en la entidad los megaproyectos enfrentan verdadera resistencia de los pueblos, sobre todo en regiones zapatistas, como sucedió con la construcción del aeropuerto de Palenque, que terminó como un elefante blanco. La megaobra del Tren, que “no dañará el ambiente”, nos revelan, ya enfrenta protestas de grupos indígenas de la selva que advierten intentos de despojos e invasión territorial, al grado que, nos dicen, han bautizado la propuesta como “El sueño de Fitzcarraldo” en La Amazonia, el hombre que buscaba construir un teatro en la selva por su gusto operístico. ¡Ups!
¿Quién atora juicio de sacerdote sobre pederastia?
Desde Coahuila, nos cuentan que en el Centro de Justicia Penal del Distrito de Río Grande en Piedras Negras, se suspendió una audiencia de juicio oral previa a dictar sentencia al sacerdote Juan Manuel Riojas, el padre Meño, procesado por el delito de violación calificada con abuso de autoridad en agravio de un ex seminarista. Aunque el hecho pudo haber pasado inadvertido, nos revelan, causó molestia que la diligencia se pospusiera por la falta de un testigo: el sacerdote Jesús Gerardo “N”, quien se encuentra de viaje en el Vaticano. Entre los ciudadanos, nos dicen, hubo indignación por dos razones: la primera, que un cura que percibe menos de 8 mil pesos al mes pueda costearse un viaje a Europa y el segundo, que justo el día que debía declarar, el religioso se encontrara con el Papa Francisco, como si quisiera pedir consejo divino.
Subestiman apoyo a víctimas de granadazos
A unos días de los festejos patrios, nos comentan desde Michoacán que los actuales diputados locales le quedaron a deber, nuevamente, respuestas a las víctimas de los granadazos del 15 de septiembre de 2008, quienes año con año les solicitan analizar y aprobar pensiones para los afectados del “primer atentado terrorista en México”. Al respecto, nos dicen, uno de los diputados que más ha sido criticado por su indiferencia a los afectados, es el priísta Roberto Carlos López, porque fue presidente del comité de administración y desde su trinchera pudo proponer la asignación de recursos para las víctimas pero, al igual que en el pasado, se limitó a guardar silencio y no hablar de los agraviados.
