El 8 de agosto de 1981 nació Roger Federer en Basilea , Suiza, pero su historia dentro del tenis comenzaría a escribirse a los 19 años de edad, el 4 de febrero de 2001, cuando derrotó —en su primera final como profesional— al francés Julien Bouttier. Desde aquel momento, el helvético ha estado presente en 152 finales.
El sábado en Dubái, 18 años después, logró levantar su título 100 ante uno de los jugadores más prometedores que tiene el circuito. Es curioso que cuando Federer ganó su primer trofeo, Tsitsipas —a quien derrotó por doble 6-4— no había cumplido aún los 3 años.
Con 37 años y 206 días, Su Majestad se convirtió en el segundo jugador en llegar a esa cifra, quedando por debajo de Jimmy Connors, quien ostenta el cartel de ser el tenista más ganador de todos los tiempos, con 109 campeonatos.
Su carrera ha estado cargada de éxitos, y ha sido Estados Unidos el país que más veces lo ha visto levantar un trofeo, seguido por Gran Bretaña, Alemania y Suiza.
Con esta victoria, escalará al cuarto lugar del ranking ATP, por lo que al finalizar el abierto de Dubái tenía motivos de sobra para sonreír y dejarnos seguir soñando en que todavía hay Federer para rato.
Roger es una leyenda viviente. Para muchos, el mejor tenista de la historia y hoy lo avalan sus 100 títulos conseguidos de la siguiente manera: 20 Grand Slams, el mayor número de toda la historia en tenis masculino, seis ATP Finals, 27 ATP Masters 1000, 24 ATP 500 y 23 ATP 250.
La elegancia en su juego, la perfección en su revés y la clase dentro de cualquier cancha, son sólo algunas de las cosas que recordaremos cuando decida poner fin a una extraordinaria carrera llena de éxitos.