En un país en el que el futbol ha sido sobrevalorado por encima de cualquier otro deporte, increíblemente los malos resultados nos siguen asombrando, sin darnos unos minutos para reflexionar, qué es lo que ha sucedido. La Selección Mexicana de futbol ha vuelto a fracasar, ahora en los Juegos Centroamericanos y no se ve para cuándo esta situación se pueda revertir.
El proceso para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 ha iniciado con el pie izquierdo y molesta escuchar las declaraciones del director técnico, Marco Antonio Ruiz, al buscar justificar el ridículo que sus dirigidos hicieron en tierras colombianas. Parece que la línea en las profundidades de la FMF , siempre será la de buscar una excusa, antes de aceptar y responsabilizarse al cometer errores. Esta es otra llamada de atención para este tema, el futbolístico, en el que predomina la soberbia y nunca ha existido la humildad.
Aún cuando sólo 10 futbolistas de los 20 que tuvieron participación en el torneo Esperanzas de Toulon , hicieran el viaje a Barranquilla , no existe un argumento sólido para tal fracaso, porque nunca antes México había terminado su participación sin una sola victoria. Los clubes que no cedieron futbolistas fueron el Groningen de Holanda, Mineros, Atlas, Monterrey, Cruz Azul y Santos . Aún así, debieron ganar.
Las expectativas sobre esta escuadra eran grandes, más allá de tener o no a los jugadores deseados, la obligación era repetir lo hecho en los Juegos de Veracruz 2014 .