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En un mundo donde las cosas muchas veces no encuentran los resultados que uno planea, hoy es el momento en el que el trabajo de cancha y el juego de conjunto tienen que aparecer para el combinado de Gerardo Martino, quien —después de dos partidos amistosos— prepara ya lo que será la Copa Oro , en la que —después de ver a otras selecciones— es aún más obligado el título.
Si bien es cierto que muchos no quisieron venir al llamado, es ahora cuando aquellos que soñaron vestir la camiseta de la Selección Mexicana demuestren la calidad que tienen y den el golpe de autoridad que se requiere para ganar en los instantes importantes.
Para muchos, esta Selección no es lo suficientemente competitiva, pero hay que recordar que estaremos enfrentando a escuadras muy pobres —futbolísticamente hablando—; es una obligación traerse el título y hacerlo con autoridad.
Martino
, a diferencia de Juan Carlos Osorio, está buscando renovar al Tricolor, pero utilizando a cada uno de los futbolistas en su posición natural, sin necesidad de estar inventando, además de que siempre está en busca de mantener el mismo sistema de juego, ya que no nos podemos olvidar que el anterior técnico vivía más preocupado por lo que hacían los equipos rivales que por encontrar un sistema con nuestra Selección y esto, lo único que generó, fue un Mundial más en el que México quedó eliminado en la segunda ronda.
No será fácil poder tener a los mejores, pero hay que trabajar con los que sí quieren estar y apostando por el juego de conjunto, buscar competir y encontrar un sistema claro, para poder pensar en cosas importantes en este ciclo mundialista.
