Que se abra la posibilidad de tener a Ricardo Ferretti como entrenador de la Selección Nacional es una noticia estupenda, pero también muestra la incapacidad y la extrema falta de respeto que le mostraron hace alguno días como se explicó a detalle en este mismo espacio.
Resulta que ha trascendido un plan de acción para intentar contratar a Ferretti como entrenador, el cual se explicó a detalle en el programa Reacción en Cadena de Canal 52. En este plan, Yon de Luisa tomaría el liderazgo de la negociación para llegar hasta la cúpula de Cemex, para que sea avalado por la propia empresa y que Ferretti vaya a la selección. Incluso, esto ha sido una noticia que llegó hasta Europa, en donde representantes de entrenadores del viejo continente ya sabe que podría darse una vacante en el banquillo de los Tigres, que es de las más cotizadas por lo que representa el pago de esa institución a sus colaboradores.
Dentro de todo este plan que se explicó en la televisión ayer por la noche, no hay opción a que llegue alguien extraño al entorno del propio Tuca, como se explica en nuestras páginas.
Tomar al equipo mexicano en enero, cuando haya culminado el Apertura 2018 parece lo más razonable; sin embargo, se abre la posibilidad de que para los partidos de la selección programados en septiembre y en noviembre (que son fecha FIFA), pudiera aparecer el nuevo entrenador de la selección combinando con su trabajo actual, idea que no es descabellada ni errónea, al contrario, sería respetar al entrenador más ganador de la historia del futbol mexicano después de Ignacio Trelles y a una institución como Tigres, que tanto le ha dado a nuestro balompié.
Sensatez en esta propuesta que, de consolidarse, sería la mejor noticia que pueda tener el futbol mexicano y no inventos y proyectos estériles y de gran desconocimiento del entorno mexicano, como se ha pretendido vender en el último lustro.
Nada tiene que ver André Villas-Boas, quien dirigió al Shangai FC o al Zenit de San Petersburgo y cuya gran carta de presentación es que formó a algunos jóvenes que han destacado como James Rodríguez o Nicolás Otamendi; o a un Gerardo Martino, cuyos últimos trabajos fueron empañados por aplicar los conceptos de los futbolistas y no de los suyos, a un hombre como Ferretti que conoce a la perfección lo que es este futbol. Nunca se olvidará ese momento cuando tomó el interinato para jugar contra Estados Unidos el pase a la Copa Confederaciones, en la que Diego Reyes se negó a ir a la zona mixta en el CAR y fue el propio Tuca quien fue por él y le indicó que tenía la obligación de atender a los medios, una pequeña muestra de la disciplina que necesita un equipo que ha sido capturado por los fubtolistas y sus caprichos, por sus intereses personales y no grupales, por eso, hoy más que nunca, se necesita el liderazgo de un hombre disciplinado y que de futbol sabe un rato largo.