Mauricio Culebro

se distinguió, durante toda su larga trayectoria en el América , por ser un hombre cabal, institucional y siempre exento de cualquier escándalo, además de haber sido un directivo que tuvo una formación desde las raíces del equipo hasta llegar a la consecución del título de Liga número 13 en la historia del club. Por eso, no se entiende esta sorpresiva decisión del dueño de la institución.

Culebro todavía tendrá la responsabilidad —en estos últimos días de la ventana de fichajes— para tener listos a los refuerzos de los que tanto se habla y todavía no se consolidan, o por lo menos no se han materializado.

Es una extraña decisión, porque no nada más fue el campeonato, sino el poder generar en invierno casi 25 millones de dólares por la venta de dos futbolistas: Diego Lainez y Cecilio Domínguez, ya que Cristian Insaurralde se iría sin generar recurso alguno, pues está a préstamo y el dueño de sus derechos federativos, el O’Higgins de Chile, ha llegado a un acuerdo con el Newell’s Old Boys para venderle el 33% del pase, por lo que no tarda en reportar con el conjunto argentino. En el mejor de los casos, las Águilas recibirían una indemnización por los meses de contrato que le restaban.

Caso similar al de Joe Benny Corona, cuya opción de compra no se hizo válida con los Xoloitzcuintles.

Si el cambio repentino de Culebro a la Federación Mexicana de Futbol fue por el papelón del césped en el Estadio Azteca , o por si continúa teniendo una estrecha relación con Yon de Luisa y se pensaría que el ex directivo todavía tenía injerencia en el equipo, resulta incongruente y un sinsentido alarmante.

Pocos conocen a un personaje que es el mediador entre el dueño y el grupo de futbol en Televisa: Joaquín Balcárcel Santa Cruz, un ejecutivo del área jurídica de muchos años en la empresa y de gran confianza para Emilio Azcárraga Jean, quien ahora tendrá que tomar una decisión quirúrgica para ver quién será el hombre que ocupe la silla más deseada del futbol mexicano, porque queda claro que —pese al buen trabajo de Santiago Baños— él se dedicará a lo que ha hecho durante toda su vida: la relación cancha-futbolistas-cuerpo técnico.

Versiones apuntaban al director de operaciones y negocios, Carlos Valenzuela , otras ya daban a Héctor González Iñárritu como el nuevo presidente de la institución, pero la realidad es que la decisión no está tomada aún y quien llegue deberá tener características innegables en cuanto a que es americanista, conoce la historia del club y no un burócrata o ejecutivo que solamente sepa sumar y restar. Es un puesto que requiere, además de alta capacidad, una sensibilidad gigantesca y, por si fuera poco, comprobada honestidad.

Se cimbró el futbol mexicano con esta noticia, porque continúa siendo inentendible para la mayoría, ya que parece que tener éxito los lleva al exilio, porque si hay en la historia reciente de este equipo directivos con muy buenas cuentas son Yon de Luisa, Ricardo Peláez y Mauricio Culebro . Eso, no hay quien lo pueda negar, ¿o se acuerdan del oscurantismo que vivió el club con Michel Bauer? Algo que los americanistas deben estar rezando para que no vuelva a suceder.

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