De entrada, resulta inexplicable que Arturo Brizio haya convocado a una conferencia de prensa para realmente no explicar como debía los graves errores que, sus árbitros han cometido con todo y la aplicación del videoarbitraje. No desmenuzó las verdaderas causas y se limitó a culpar a los silbantes, quienes quedaron expuestos por el presidente de su Comisión, y quedaron disminuidos como gremio.
Cuando Brizio era árbitro —incluso mundialista—, siempre navegó con la perfección como su bandera, hoy parece no equivocarse y da a entender que son otros los que no entienden los procedimientos y los protocolos que deben seguir con el VAR. Pero que no se olvide que es el principal responsable de que los silbantes no sepan cómo hacer su trabajo.
Entonces que no nos venga con que son los árbitros, sobre todo los veteranos o de mayor jerarquía, los que se encuentran renuentes a utilizar el VAR como se debe y si esto es verdad, si tiene documentado que hay centrales que no le hacen caso a los que están en la unidad móvil para no “ser exhibidos”, que los corran, así de fácil. No entiendo a una empresa o a un patrón al que no le hagan caso sus empleados y no haga algo al respecto. Pareciera que es mejor dejarlos señalados ante la opinión pública que realmente corregir lo que están haciendo mal.
Pero insisto, no solamente es de los silbantes y de la actitud que han mostrado con relación a la ayuda que significa el videoarbitraje. Se trata también de la pobre instrucción y la falta de capacidad para convencer a todos los involucrados —dueños de los equipos y productoras de la señal de los partidos—, de la necesidad de invertir para tener cámaras exclusivas para el VAR o acomodar algunas de las que se utilizan para las transmisiones conforme se necesita para tener tomas más claras que ayuden a tomar la mejor decisión en jugadas polémicas.
Esa es la tarea que también debería realizar Brizio y no solamente salir a no decir algo contundente respecto a los errores que han tenido y culpar a terceros, asegurar que se castigará a árbitros como Jorge Antonio Pérez Durán. El cabildeo con los dueños para que le inviertan en más cámaras que vayan directamente a la unidad de Media Pro, o negociar con los productores de las televisoras. Pero no parece ir por ese camino.
Hay que recordar que en la pasada Copa del Mundo , el VAR de la FIFA tenía acceso a 33 cámaras, de las cuales, dos estaban destinadas exclusivamente a determinar el fuera de juego. Además, se utilizaron cámaras que permitían la grabación lenta y ultralenta, para tener mejor detalle de algunas jugadas. Es decir, al ser el evento máximo del futbol mundial, le invirtieron para fallar lo menos posible en la aplicación del videoarbitraje.
Y así es como debería ser en todas las ligas, no solamente en México , aunque ya que hablamos de la Liga MX , queda claro que lo que menos quieren es atreverse a exigir que les den la mayoría de los elementos que les pueden ayudar a dar certeza.
Si bien las fallas han sido de los árbitros en la cancha y los del VAR, Brizio también tiene su responsabilidad y no puede darle la espalda y salirse por la fácil, que es culpar a los demás.
@gvlo2008
gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx