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Toda la atención centrada por intentar explicar lo inexplicable por la mejor elección de entre 24 entrenadores para la Selección Nacional, de si hay o no vetos a jugadores por sus comportamientos o intentar argumentar por qué jugar con Argentina dos veces en un lapso de cuatro días, pero nadie explica lo que ha ocasionado el gran fracaso de la selección femenil en el premundial que se lleva a cabo en Cary, Carolina del Norte.
El futbol femenil, que lleva ya dos torneos y medio con la conformación de la liga en nuestro país, en el que han invertido y desarrollado futbolistas, y que tiene muchas representantes en Europa, ayer no pudo pasar en un grupo que compartía con la siempre débil Trinidad y Tobago, además Estados Unidos y Panamá, contra las que perdieron consumando un retroceso en todos los aspectos, ya que el no estar en el Mundial de Francia 2019 hará replantearse a los directivos si vale la pena la inversión en una liga que tiene que nutrir a las selecciones nacionales para evitar estos ridículos. Y quien no lo quiera ver así, que nos explique si en Panamá hay mayor desarrollo del futbol femenil que en México.
Hay que decir que ningún directivo de peso viajó con este equipo, fue abandonado, quizá porque en Carry no hay tan buen shopping y eso se sumó a los problemas extra cancha, denunciados por jugadoras en sus redes sociales, como la delantera Renae Cuéllar, quien fue directo sobre Roberto Medina, a quien acusó de no llevarla a este premundial después de que fue madre hace poco tiempo.
Y no es la primera jugadora que se queja del maltrato en la naciente historia del futbol femenil. Para el preolímpico rumbo a Río 2016, Charlyn Corral, Kenti Robles y Pamela Tajonar manifestaron su inconformidad por no estar en la convocatoria de Leonardo Cuéllar, a quien acusaron de tener rencores contra algunas de ellas por cuestiones del pasado. Se fue Cuéllar, se quedó Medina y realmente no hubo un cambio en esta selección que se suma a los grandes fracasos de la historia, lo que debería preocupar por el desencanto que puede generar entre los que ponen el dinero en busca de potenciar el futbol femenil en México.
En verdad que ha sido un inicio tormentoso el de Yon de Luisa al frente de la Federación Mexicana de Futbol, y parece que ninguno de sus colaboradores cercanos es capaz de ayudarle a remediar las cosas según el orden de importancia. Y como ha pasado desde hace mucho tiempo, el responsabilizar a medios de comunicación por informar o denunciar algún acto, parece más sencillo para estos personajes que aceptar la realidad y ponerse a trabajar. Los medios no eligen al entrenador de la Selección Nacional, tampoco vetan o no vetan futbolistas y mucho menos juegan las eliminatorias mundialistas. Tres temas que son espinosos y para los que tendrían que comenzar a buscar las soluciones adecuadas.
Hoy, México juega un partido intrascendente ante Costa Rica en Monterrey, en donde hasta ayer por la noche, la gente no había hecho mucho por comprar boletos, la afición está ofendida, ya que se sienten timados porque nunca les traen un partido de eliminatoria y en cambio les llegan con las migajas que dejó la penúltima fecha FIFA.
@gvlo2008
gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx
El futbol femenil, que lleva ya dos torneos y medio con la conformación de la liga en nuestro país, en el que han invertido y desarrollado futbolistas, y que tiene muchas representantes en Europa, ayer no pudo pasar en un grupo que compartía con la siempre débil Trinidad y Tobago, además Estados Unidos y Panamá, contra las que perdieron consumando un retroceso en todos los aspectos, ya que el no estar en el Mundial de Francia 2019 hará replantearse a los directivos si vale la pena la inversión en una liga que tiene que nutrir a las selecciones nacionales para evitar estos ridículos. Y quien no lo quiera ver así, que nos explique si en Panamá hay mayor desarrollo del futbol femenil que en México.
Hay que decir que ningún directivo de peso viajó con este equipo, fue abandonado, quizá porque en Carry no hay tan buen shopping y eso se sumó a los problemas extra cancha, denunciados por jugadoras en sus redes sociales, como la delantera Renae Cuéllar, quien fue directo sobre Roberto Medina, a quien acusó de no llevarla a este premundial después de que fue madre hace poco tiempo.
Y no es la primera jugadora que se queja del maltrato en la naciente historia del futbol femenil. Para el preolímpico rumbo a Río 2016, Charlyn Corral, Kenti Robles y Pamela Tajonar manifestaron su inconformidad por no estar en la convocatoria de Leonardo Cuéllar, a quien acusaron de tener rencores contra algunas de ellas por cuestiones del pasado. Se fue Cuéllar, se quedó Medina y realmente no hubo un cambio en esta selección que se suma a los grandes fracasos de la historia, lo que debería preocupar por el desencanto que puede generar entre los que ponen el dinero en busca de potenciar el futbol femenil en México.
En verdad que ha sido un inicio tormentoso el de Yon de Luisa al frente de la Federación Mexicana de Futbol, y parece que ninguno de sus colaboradores cercanos es capaz de ayudarle a remediar las cosas según el orden de importancia. Y como ha pasado desde hace mucho tiempo, el responsabilizar a medios de comunicación por informar o denunciar algún acto, parece más sencillo para estos personajes que aceptar la realidad y ponerse a trabajar. Los medios no eligen al entrenador de la Selección Nacional, tampoco vetan o no vetan futbolistas y mucho menos juegan las eliminatorias mundialistas. Tres temas que son espinosos y para los que tendrían que comenzar a buscar las soluciones adecuadas.
Hoy, México juega un partido intrascendente ante Costa Rica en Monterrey, en donde hasta ayer por la noche, la gente no había hecho mucho por comprar boletos, la afición está ofendida, ya que se sienten timados porque nunca les traen un partido de eliminatoria y en cambio les llegan con las migajas que dejó la penúltima fecha FIFA.
@gvlo2008
gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx
