El gol de Toni Kros fue suficiente para que el desánimo esté presente en Rusia 2018 con los aficionados mexicanos, quienes no pueden comprender que el camino a octavos de final depende de la Selección Mexicana , de nadie más.

Jugar contra Suecia representa la prueba más importante para Juan Carlos Osorio , quien cumplió 50 partidos dirigidos el sábado en Rostov contra Corea del Sur, de los que perdió sólo seis, pero de esos, siempre fueron en los momentos para trascender, para encontrar la gloria deportiva, concepto que el colombiano lo tiene presente día a día.

Es decir, cuando la Selección debe ganar, pierde, así sucedió con Chile en Copa América Centenario, contra Alemania y Portugal en Copa Confederaciones y contra Jamaica en Copa Oro.

Por eso, Suecia es el partido para cambiar y entender que sí es Osorio el personaje que llevará a México a donde nunca antes ha llegado.

Es una obligación ganarle a Suecia, vaya, aunque sea empatarle. La diferencia entre estos dos equipos es abismal, empezando en los presupuestos y generación de recursos entre ambas federaciones, ya que México está colocado y penetrando cotidianamente en dos mercados (México y Estados Unidos), Suecia está ubicado 24 del ranking de FIFA, la selección de Osorio está en el 14. Mientras en Suecia tienen una liga semi profesional, en México se pagan los mejores salarios del continente en su liga.

Es comercialmente un modelo exitoso con estructuras sólidas. Suecia no tiene a figuras icónicas como Zlatan Ibrahimovic, Freddie Ljunberg, Rick Larsson o Markus Rosenberg.

Es un equipo de media tabla europea que trascendió por eliminar a la peor Italia de la historia.

Suecia viene de un golpe durísimo, de irle ganando a Alemania y terminan tendidos en el terreno por el gol de Kros, mientras que México viene de dos victorias consecutivas, igualando lo hecho en 2002, cuando derrotaron a Ecuador y Croacia.

Es decir, hasta en eso tiene ventaja el equipo mexicano.

Existen alarmantes lugares comunes que se están aplicando para este partido. Que si en el futbol todo puede pasar, que si la pelota es redonda y es igual para ambos, que los partidos hay que jugarlos, que si bla, bla, bla. Insisto, por lo que es la estructura del futbol mexicano y el sueco debe tener una amplia, muy amplia ventaja México, además de obligación.

Juan Carlos Osorio

debería repetir a los 11 que iniciaron contra Alemania en Moscú. Una barbaridad sería guardar jugadores para no exponerlos a una tarjeta amarilla, como es el caso de Héctor Herrera y Héctor Moreno , quienes están apercibidos y si reciben otra amarilla estarían suspendidos un partido.

De verdad que futurear sería una medida ilógica y poco profesional, porque si no juegan estos dos excelentes y titulares jugadores sería el peor día de Osorio como entrenador nacional. Deben jugar con lo mejor contra Suecia, el partido del desenlace, el hasta ahora, más importante de Rusia 2018.

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