México
tiene que ganarle a Costa Rica para evitar un colapso en nuestro futbol.
Quedar eliminado implicaría un fracaso absoluto de la reingeniería que pretende el técnico Gerardo Martino, que de paso, atascaría de dudas su trabajo como entrenador. Perder ante los ticos sería humillante, desastroso, inconcebible, terrorífico.
Ojalá y no suceda, pero si ocurre, cuidado con las consecuencias, porque siempre se busca por lo menos a un culpable. No se trata de menospreciar a los ticos, simplemente es reconocer que México es mejor equipo en todo sentido.
DT
¿Cuánta presión cargará Martino si es que llega un descalabro ante los costarricenses? Quedar fuera sería un fastidioso retroceso. La marca perfecta del Tata se irá directo a la basura, los jugadores tendrían que lidiar toda su vida con la etiqueta de perdedores, los dirigentes serían juzgados por los caprichos de ciertos futbolistas.
El ambiente relacionado a la selección cambiaría radicalmente, de entrada habría un contacto mínimo con el equipo; se endurecerían las reglas para los que integran y cubren al representativo mexicano. El mentado “cambio generacional” se pondría en tela de juicio y entonces que regresen los que ya no entraban en planes para salvar el prestigio, porque ellos tienen la experiencia para el entorno.
Por eso es muy importante que México no extravíe su futbol y evite confusiones.
Debe dejar claro quién manda en la zona y de una vez meterle pánico a los que esperemos vaya a enfrentar hasta el final de la competencia.
@elmagazo