Segundo desaire del gabinete
Nos cuentan que miembros del próximo gabinete han tenido cada vez más asuntos importantes por atender, lo que significó dejar de asistir a dos importantes foros del sector económico y empresarial. Nos recuerdan que la semana pasada, en el foro organizado por The Economist, los principales representantes del nuevo gobierno cancelaron de última hora su participación en el evento y sólo estuvo presente para la clausura el próximo secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú. Algo similar pasó ayer en la reunión anual de industriales de la Concamin, a la cual no llegó el próximo secretario de Hacienda, Carlos Urzúa. Y si bien se esperaba a la futura secretaria de Energía, Rocío Nahle, y también a Jiménez Espriú, nos cuentan que cancelaron y dejaron que la representación del gabinete le tocara a Gerardo Esquivel, futuro subsecretario de Egresos, quien viene siendo el bateador emergente para este tipo de encuentros organizados por el sector empresarial.
Encuentro Díaz de León-AMLO
Aunque Alejandro Díaz de León ha querido mantener alejado al Banco de México (Banxico) de la grilla política, nos cuentan que lo que sucedió ayer, además de haber sido un hecho inédito, nos hizo recordar lo que decía el político mexicano, Jesús Reyes Heroles, quien señalaba que en política la forma es fondo. Nos dicen que el gobernador central, al haber acudido a las oficinas de transición para encontrarse con el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, dice mucho. Primero, porque el plan para congelar precios de las gasolinas le favorece a Banxico por el efecto positivo en la inflación. Segundo, porque seguramente se habló de las posibles medidas de austeridad, ahorro y disciplina en el gasto del instituto central para 2019. Otro tema clave es la permanencia de Díaz de León como gobernador, porque no se sabe si va a cubrir sólo el periodo que empezó Agustín Carstens, o de lo contrario tendría que ser ratificado.
¿“Sacrificar” a EU por Tren Maya?
El que está que no lo calienta ni el sol es Pablo Azcárraga, líder del Consejo Nacional Empresarial Turístico, porque cada vez se habla más de que el nuevo gobierno planea meter mano a los recursos de promoción turística para financiar el proyecto del Tren Maya, nos dicen. Se viene señalando que el próximo gobierno piensa gastar menos para promocionar la marca México en Estados Unidos, argumentando que ese mercado ha madurado lo suficiente como para cambiar drásticamente la estadística de que uno de cada cinco estadounidenses que viajan al extranjero elige al país. Aun así, el Tren Maya la tiene difícil, porque, según el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, si se cancela el nuevo aeropuerto la iniciativa privada no querrá financiar el ferrocarril, mientras el presidente electo Andrés Manuel López Obrador apuesta a que dos terceras partes del dinero para el proyecto surjan del sector privado.
Resurge plan de SAT autónomo
Una añeja propuesta del gremio de contadores y académicos podría hacerse realidad. Nos dicen que ahora que probablemente la guillotina de la austeridad le llegue a la subsecretaría de Ingresos de Hacienda, una opción puede ser fortalecer al brazo fiscal de la dependencia que a la fecha encabeza Osvaldo Santín. Nos cuentan que no se puede descartar que en los planes de reestructuración de la administración pública federal el Servicio de Administración Tributaria (SAT) salga ganando, al dotarlo de autonomía. Con ello, nos cuentan los que saben que podría terminar el conflicto de interés en la Secretaría de Hacienda, pues se encarga tanto de la política de ingresos como de la tarea de recaudar impuestos. Esta propuesta no es nueva, pues en reiteradas ocasiones la ha planteado el gremio de la contaduría pública. De concretarse, nos dicen que se debe definir quién será responsable de las aduanas.