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Carlos Lomelí, superdelegado del gobierno federal en Jalisco, prometió que ninguna de sus empresas del sector farmacéutico participaría en licitaciones públicas en tanto él fuera funcionario para no despertar sospechas de que se beneficiaba de su relación con Andrés Manuel López Obrador. No sería uno de esos funcionarios neoliberales de los de ‘antes’, cuando en México había la corrupción tolerada que ahora el presidente dice ha desaparecido.
Pero resulta que no. Que Carlos Lomelí mintió.
El pasado 1º de mayo publiqué en este espacio una columna a propósito de los negocios en el ámbito de las farmacéuticas de Carlos Lomelí, en donde daba cuenta de cómo sus empresas en el sector saldrían beneficiadas del veto a Grupo Fármacos Especializados, Maypo y Dimesa, que el gobierno les impuso por ser ‘inmorales’.
Como respuesta a este señalamiento, Lomelí publicó en twitter el comunicado en el que decía que “por carecer de sustento y por tratarse de una especulación que perjudica tanto la reputación de su servidor, como de la administración pública federal, me permito rechazar tajante la opinión vertida en la columna de Ana Paula Ordorica, publicada en ELUNIVERSAL. En congruencia con la política del Presidente Andrés Manuel López Obrador, afirmo y dejo en claro:
1. Ninguna de las empresas en las que su servidor tenga participación, cuenta con contrato vigente con ningún ente gubernamental.
2. Ninguna de las empresas en las que su servidor tenga participación, entrará a concurso o licitación alguna.
Agradezco sea otorgado el derecho de réplica.
Atte. Dr. Carlos Lomelí, Delegado para el Desarrollo del Gobierno de México en Jalisco.”
Pues resulta que no han pasado ni dos meses después de ese comunicado tan firme del Dr. Lomelí cuando una de sus empresas ya participa en licitaciones del sector farmacéutico. El lunes 17 de junio se llevó a cabo la Licitación Pública Internacional Abierta Electrónica No. LA-012000991-E82-2019 para la contratación consolidada de bienes terapéuticos (medicamentos, material de curación, material radiológico y de laboratorio) para el segundo semestre del ejercicio fiscal 2019.
En el proceso participaron 311 compañías y en la lista aparece, nada más y nada menos que Laboratorios SOLFRAN SA. Esta firma es de Carlos Lomelí, según aparece dentro de las siete empresas reconocidas por él mismo como de su propiedad en su declaración 3 de 3, presentada el 24 de febrero de 2016.
Así que, Dr. Carlos Lomelí, ¿no que no iba a participar en estas licitaciones mientras fuera funcionario para no afectar la imagen del gobierno federal?
APOSTILLA:
Si un gobierno dice que va a cambiar las cosas para simplemente mover las fichas y repartirlas bajo el mismo cuestionable modus operandi, vale la pena que quienes tenemos la oportunidad de contar con un espacio en los medios lo hagamos patente. AMLO no está acabando con la mafia en el poder ; no está terminando con los amiguismos; no está terminando con los contratos en lo oscurito.
AMLO lo que hace es poner a México en el peor de los mundos: funciona como un priísta buscando reconstruir la enorme maquinaria que les permitió a los señores presidentes ser los mandamases durante un sexenio, pero además es alguien que cree que habla en nombre del pueblo y que tiene la batuta de Mesías para salvar a México.
Y como es el Mesías, quizás seis años no serán suficientes. Cuando menos en la era del PRI, que pensábamos estábamos superando por momentos, teníamos claridad de que alguien —el señor Presidente— mandaba por un sexenio y luego se acababa su turno. Ahora estamos en el peor de los mundos porque el Mesías puede decidir que seis años no alcanzaron para el verdadero cambio. El peor de los mundos que un caso como el de Carlos Lomelí hace evidente: siguen estando los empresarios favoritos; sigue habiendo Mafia en el Poder; siguen los acuerdos en lo oscurito y los que menos tienen seguirán pagando los costos del retraso y la pobreza que genera todo lo anterior.
www.anapaulaordorica.com
@AnaPOrdorica