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Más allá de lo que termine siendo el porcentaje final que arroje el cómputo total de la elección presidencial en México, algunas encuestas comienzan a dibujar una interesante radiografía de aquellos electores que dieron su voto a Andrés Manuel López Obrador, el candidato ganador. Tal es el caso de la casa encuestadora Defoe, que realizó una encuesta de salida el domingo 1 de julio y que generosamente me compartió algunos de sus resultados para este espacio.
De los 1,783 casos emergen varias conclusiones interesantes:
1. Los electores decidieron su voto mayoritariamente durante el periodo de campañas. Un 39% así lo hizo, mientras que un 29% lo hizo al final del llamado periodo de precampaña. Es decir, cuando los partidos terminaron de fingir que estaban en un proceso de selección interna para elegir a su candidato. Un 15% de los ciudadanos respondieron que habían elegido por quién votar en el momento mismo de tener que emitir su voto. Otro 15% dijo que siempre vota por el mismo partido, sin importar a quién postule.
2. Hay pocas diferencias en términos de género. La votación de hombres para AMLO fue de 51%, mientras que de mujeres fue de 49%. En donde Defoe encontró una diferencia un poco más significativa fue en los votantes del candidato Ricardo Anaya (hombres 19%, mujeres 23%) y de José Antonio Meade (hombres 20%, mujeres 17%). Por El Bronco la diferencia es mínima: un 10% de hombres y un 11% de mujeres.
3. En el tema de la edad nos encontramos con ciertas sorpresas. Para muchos analistas, serían quizá los jóvenes que votarían por primera vez en estas elecciones —poco más de 12 millones de personas de entre 18 a 25 años— los que podrían darle el triunfo a AMLO. Los números cuentan una historia distinta. Sí, ese segmento de edad votó mayoritariamente por Andrés Manuel (45%), seguido de Ricardo Anaya (22%) y finalmente por José Antonio Meade (11%). Y la sorpresa aquí: el 22% de estos jóvenes dicen haber votado por El Bronco, el mocha- manos, el de la yegua y la mujer, el de las adolescentes “panzonas”.
En los segmentos de edad de 26 a 35 y de 36 a 45 años, la preferencia por AMLO incluso se incrementó a más del 50% (53 y 52 por ciento, respectivamente). Pero fueron los ciudadanos de entre 46 a 55 años de edad los que votaron más contundentemente por el candidato de Juntos Haremos Historia (un 60%). El PRI, en total debacle electoral, tuvo su mejor comportamiento en el segmento de las personas de entre 56 a 65 años.
4. Los resultados por escolaridad cuentan una historia similar e interesante: en todos los niveles ganó Andrés Manuel: sin ningún nivel de escolaridad completo (49%), primaria (44%), secundaria (53%), preparatoria (53%) y universidad o más (47%). El mejor rendimiento del PRI-PVEM-Panal lo tuvo en el segmento de los ciudadanos que sólo tienen primaria concluida (33%). El Bronco lo hizo mejor con preparatorianos y universitarios (16% de los ciudadanos con preparatoria y universidad que ejercieron su derecho al voto).
5. Por nivel de ingresos, Andrés Manuel —como en el caso de género, edad y escolaridad— consistentemente “ganó” en cada categoría: 41% de ciudadanos con ingreso de hasta mil 500 pesos mensuales, 47% con ingresos de mil 500 a 3 mil, 53% de personas con ingresos de entre 3 mil y 6 mil pesos, 49% con ingresos de entre 6 mil y 12 mil y 44% de ciudadanos con ingresos mayores a 12 mil pesos mensuales.
Dos datos más: el 68% desaprueba la administración del presidente Peña y el 47% dijo que su voto fue “para tener un cambio”. Y fue carro completo. Así el votante del 1 de julio y así el “bono” democrático con el que llega Andrés Manuel.