Mucha acción y poca reflexión es lo que se ha vivido en los medios sociales digitales, a raíz de la llegada de la #CaravanaMigrante a México. Los medios en manos de los ciudadanos han apostado de nueva cuenta a la polarización y a la división, ante un fenómeno social tan complejo como es el tránsito de personas de un país a otro.
Sobre los orígenes de la #CaravanaMigrante aún hay muchas dudas que disipar. Algunos aseguran que se trató de un movimiento de generación espontánea, que surgió a raíz de la conmemoración del Día de la Hispanidad, el 12 de octubre pasado. Los seguidores de las teorías de la conspiración sostienen que se diseñó desde antes e incluso que el éxodo de personas forma parte de la estrategia electoral del presidente @realDonaldTrump para infundir miedo entre sus electores, y mantener la mayoría legislativa de cara a las elecciones de noviembre próximo.
Lo cierto es que la mayoría ubica a Bartolo Fuentes, periodista independiente y ex diputado del opositor Partido Libre de Honduras, como el principal organizador de la marcha, a la cual habría convocado a través de las redes sociales.
Se inició en San Pedro Sula, Honduras, el 13 de octubre y llegó a México seis días después, tras burlar los cercos policíacos en Guatemala. La víspera el gobierno mexicano envío tropas de la Policía Federal a Chiapas, para vigilar la frontera. Esto provocó la reacción del presidente Trump, quien escribió en Twitter @realDonaldTrump Thank you Mexico, we look forward to working with you! (Gracias, México, esperamos trabajar juntos) Y retuitéo el video de @karlazabs, que difundía el arribo de la Policía con el siguiente mensaje: MIGRANT CARAVAN: Two federal police-filled planes w/anti-riot gear landed near the Mexico/Guatemala border this morn (vid source: Policia Federal de Mexico). ( CARAVANA MIGRANTE: dos aviones llenos de policías antidisturbios aterrizaron cerca de la frontera México-Guatemala esta mañana).
En su habitual política de relaciones exteriores @realDonaldTrump aseguró que los migrantes que quieren ingresar a su país son delincuentes y que México tiene la obligación de darles asilo. Incluso ofreció ayuda militar para detenerlos, y si no lo lograba nuestro país, él cerraría la frontera sur de los Estados Unidos. Por su parte el presidente @EPN difundió un video en sus redes sociales en el cual manifestó su respeto a la migración, pero pidió que se realizara bajo términos de legalidad. Mientras que el presidente electo @lopezobrador_ ofreció visas de trabajo a los emigrantes, para que se quedaran a laborar en México.
En los medios sociales digitales el tema de la #CaravanMigrante generó más de 42.7 millones de interacciones, siendo Facebook la arena donde se realizó la mayor conversación, ya que acaparó el 42% del contenido. En YouTube se compartió el 26%, mientras que en Twitter el 24% y en Instagram el 8%. En cuanto al contenido se refiere, el 37% fueron sólo comentarios, el 25% videos, el 21% imágenes y el 17% enlaces a sitios noticiosos o de interés.
El 54% de la audiencia cree que es una situación inhumana y que los migrantes deben ser recibidos en México, el 37% dijo que no es obligación ni de nuestro ni de ningún país recibir gente que no sea de su nación; el 25% no tomó partido en torno a los migrantes y dirigió su repudio hacia el presidente @EPN. El 22% de la audiencia afirma que de entrar los migrantes a México se quedarán aquí y ante la falta de oportunidades comenzarán a delinquir. Sólo el 18% criticaron el discurso de @realDonaldTrump.
Aunque los números pueden parecer fríos, lo cierto es que en la defensa de los migrantes y en su rechazo, afloraron las más encendidas pasiones de los hacedores del contenido de los medios sociales digitales, que nos mostraron lo mejor y lo peor, del pensamiento del mexicano.
Por la magnitud de su alcance y los sentimientos que pueden generar, los medios sociales digitales están llamados a ser una herramienta de unión entre la sociedad, mantener la consigna de generar antagonismos es pervertir el fin de una de los canales de comunicación más asombrosos con los que cuenta la humanidad.