Qué lejos está el último titulo de la Albiceleste. Fue en la Copa América de Ecuador, hace 26 años, cuando le ganó a la debutante Selección Mexicana . Ha pasado toda una vida.
Ahora llegamos a 2019 con la duda de quién está más necesitado de un título: Lionel Messi, quien no ha ganado nada con la selección mayor, o la Albiceleste, que tiene más de dos décadas sin levantar un trofeo.
El aficionado argentino ha sufrido Mundial tras Mundial ; desde el ‘94 hasta 2018 ha visto pasar talentosos futbolistas, la mayoría jugando en importantes clubes de Europa. Dirigidos por distintos entrenadores, desde Bielsa, Maradona, Sampaoli, hasta llegar a Scaloni.
El mejor jugador en la actualidad necesita con urgencia un logro sonoro y qué mejor escenario que el mítico Brasil . El histórico goleador de la selección, con 67 tantos, buscará dar un golpe en la mesa a sus detractores, esos —en su mayoría de la vieja guardia— que lo siguen comparando con Maradona y dicen que no aparece cuando se enfunda la playera de su país.
Messi ha aprendido a vivir entre el mundo de fantasía del Barcelona y, de un momento a otro, pasar al atormentado universo del futbol argentino.
La tarea no será fácil para la Pulga. Otro obstáculo importante que tendrá que librar es la brecha generacional de esta renovada selección argentina. En esta lista de 23 de Scaloni, hay 10 debutantes en torneo oficial. Seamos honestos, el único que se sienta en la misma mesa que el jugador del Barça es Sergio Agüero, un escalón abajo Ángel di María y a la distancia los jóvenes sensación, como los Dyabla y Lo Celso.
Una primera y dura prueba en el debut ante Colombia . Será interesante ver la química del combinado nacional y el estado de ánimo de Messi.
Lionel
está viviendo entre disfrutar ser Messi o ser de forma obligada Messi. Esas son las dos realidades que vive el mejor jugador, de este momento, en el mundo. Ojalá que sus compañeros comprendan que Messi no va a jugar ante Colombia , va a hacerlo por la ambición de sentarse a la mesa como el tercer mejor jugador de la historia y ojalá Leo entienda que sus compañeros son terrestres y hoy, más que nunca, lo necesitan.
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