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Como se recordará, en la antesala de reponer el procedimiento el gobierno anterior canceló el proyecto, lo que dio lugar a una reclamación internacional aún en tribunales.
La causa china, en el escenario, había sufrido un descalabro más: el veto, por razones de equilibrio ecológico, de un colosal centro de exhibición y venta de sus productos bajo la razón social Dragon Mart, que se instalaría en Cancún.
La exposición de motivos para otorgarle la concesión a China Railway se apuntalaba en su experiencia en la tarea, pero sobre todo en la posibilidad de obtener el financiamiento reclamado vía el gobierno de su país. El caso es que nunca se volvió a hablar de la opción china para el Tren Maya.
Y el caso es que a decir del jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, el gobierno de Estados Unidos le pidió al país rechazar capitales chinos, con énfasis en actividades estratégicas.
Naturalmente, el ferrocarril es una de ellas.
La exigencia, a cambio de acelerar la aprobación del acuerdo mercantil con México y Canadá, empezando por excluir a los dos países del arancel global al acero y aluminio, la colocó en la mesa el secretario de Comercio del país vecino, Wilbur Ross.
El marco habría sido el foro CEO Dialogue celebrado en Mérida el pasado 12 de abril.
Aunque la inversión china hacía el país ha sido raquítica de cara a su enorme potencial, la posibilidad de aumentar el flujo justificaba la política de la Casa Blanca de colocar piedras en el camino a la inversión de su país, con énfasis en el traslado de plantas.
En 2017, por ejemplo, último año de que se tiene registro, el flujo de capital del país del Extremo Oriente al nuestro fue de sólo 228.1 millones de dólares.
En la coyuntura del TLCAN que le abría la puerta a la instalación de maquiladoras extranjeras con opción de exportar sin aranceles a Estados Unidos, de 1994 a 2017 el capital chino que llegó al país alcanzó mil 67 millones de billetes verdes.
El panorama de intenso gris habla de que en el propio año que arrancó el acuerdo mercantil el monto fue de ¡millón y medio de dólares!
¿Colocada en las trincheras la guerra comercial EU-China, durante abril pasado, disminuidas en 17% las exportaciones orientales a ese país, México se convirtió en el primer socio comercial de éste.
En las hostilidades, la posibilidad apunta a la salida de maquiladoras de EU para algunas de ellas domiciliarlas en México. ¿El que no está conmigo está contra mí?
Balance general.
Por tercera ocasión, el magnate Carlos Slim insiste en que la posibilidad real de que se alcance el anhelado 4% de crecimiento económico se sustentaría en un mayor flujo de inversión privada. El hecho es que mientras las firmas extranjeras comienzan a acercarse en el escenario del nuevo gobierno, las nacionales se mantienen a la expectativa pese a las promesas y pese a la creación del Consejo para el Fomento a la Inversión, el Empleo y el Crecimiento económico, que por cierto aún no se ha instalado oficialmente. Por lo pronto, el Inegi confirmó el dato preliminar de una caída de 0.2% del Producto Interno Bruto durante el primer trimestre del año.
Meollo del asunto.
Colocada en la mesa la lista de periodistas que en el sexenio pasado recibieron apoyos del gobierno por más de mil millones de pesos, facturados en diversas razones sociales que amparaban revistas, programas de radio o sitios electrónicos, el punto fino sería discernir el costo-beneficio para el gobierno. Este se mide en función de la audiencia. Si ésta es raquítica, es evidente que el mensaje era para el periodista que creó el medio, con proa a su actividad en diarios o medios electrónicos.
Durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari se prohibió por decreto otorgar dádivas en directo a comunicadores, por más que siempre hubo forma de eludir el mandato. Ante la posibilidad de entrar a la ilegalidad, se crearon sitios alternos en la coyuntura del crecimiento exponencial de las redes sociales.
