El golpe en el escritorio provocaría no la revisión de la efectividad de los programas sociales, sino lo más simple: cambiar la metodología para medir la pobreza.
A contrapelo de su autonomía, el Inegi buscó la vía para pintar de otro color las cifras, lo que encendió los focos rojos en el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, conocido como Coneval.
Pese a que su autonomía estaba y está prendida con alfileres al no haberse aprobado aún las leyes secundarias sobre la reforma que la otorgó, el organismo logró detener la posibilidad del maquillaje.
Más tarde, el Coneval tendría un nuevo choque con el gobierno anterior al descalificar el programa social estelar creado a la llegada de Rosario Robles a la Secretaría de Desarrollo Social: “México sin hambre”.
Creado en 2005 a instancias del entonces secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, como una suerte de contraloría para medir el costo-beneficio de las partidas para programas sociales, el Coneval no sólo evalúa, sino diseña políticas públicas vía la investigación de los estándares que apadrinan el concepto de pobreza.
La posibilidad, esbozada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, de fusionarlo al Inegi, levantó una espesa polvareda dado el énfasis, el impulso de su gobierno a los programas sociales.
La contradicción es evidente. Dada la multiplicación de las partidas de apoyo a los más desprotegidos, lo que le causó escozor a los sectores conservadores de la sociedad, el evaluar la efectividad del gasto constituye el mayor antídoto frente a la crítica.
Nadie, al margen de los rencores patológicos por la aplastante victoria del tabasqueño, podría calificar de demagógica la frase principal de campaña de éste en 2006: “Primero los pobres”.
Aunque el Inegi mide el marco cuantitativo con relación a los índices de pobreza desde diversas perspectivas, el Coneval lo hace desde el marco cualitativo, bajo la ecuación de pobreza, educación y salud.
La validez de los programas sociales no se mide sólo por el índice de pobreza del país, sino por la calidad de vida de quienes abandonan la estadística.
Así, aunque entre 2008 y 2016 creció en 3.9 millones el número de pobres del país, para llegar a 53 millones 418 mil 151, hete aquí que los ubicados en pobreza extrema descendieron 2.4 millones, para totalizar 9 millones 328 mil 582.
¿Medalla de oro para Rosario Robles?
¿Y el acceso a servicios de salud, educación y alimentación?
¿Destruir para construir?
Balance general
Aunque técnicamente, como lo reconocen Banorte y CitiBanamex, el país no ha entrado en fase de recesión, al prolongado descenso en el crecimiento se suma ahora el retroceso de 0.03% en mayo pasado.
Durante abril se había registrado un avance de 0.08%.
El panorama es de claroscuros. Mientras el sector de servicios registró un incremento de 0.77%, en paralelo al primario, cuyo salto fue de 0.7%, la derrota la sustenta la actividad industrial.
El descenso fue dramático: 4.66% en promedio, destacando el sector de construcción, con una caída de 6.25%.
Se diría, pues, que la parte del motor que no arranca es la actividad productiva, a contrapelo de una mayor dinámica del mercado interno.
Palomita de Coparmex
Convertida en la punta de lanza de la ofensiva radical de un sector empresarial contra el gobierno, la Coparmex debió reconocer, de cara a una encuesta, que los niveles de corrupción han descendido bajo el nuevo régimen.
Si el nivel detectado en julio del año pasado era de 41.7%, en el mes que corre llegó a 36.5%.
El 62% del marco que pervive apunta a trámites estatales y municipales.
A nivel federal el porcentaje es de 24%.
Aunque las voces se mantenían a nivel de susurro, la Coparmex había encendido los focos rojos ante los niveles de podredumbre alcanzados en el anterior sexenio.
Acorralan a Lozoya
Al margen de la detención de su madre en Alemania y de las nuevas pruebas acumuladas en su contra, la persistencia en la congelación de sus cuentas dictada por un juez coloca a Emilio Lozoya de espaldas al callejón.
En la desesperación, el exdirector general de Petróleos Mexicanos sigue filtrando señales de que podría llevarse de corbata a personajes como el exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray, y al propio expresidente Enrique Peña Nieto.
¿Espíritu democrático?
Descartada la posibilidad de una nueva reelección de su presidente, Gustavo de Hoyos, cuyo periodo termina en diciembre, se está planteando una reforma de estatutos que, de aprobarse, modificaría radicalmente la balanza electoral.
Estamos hablando de contabilizar un mayor número de votos a los centros del organismo al interior del país, con relación al número de afiliados.
Así, por ejemplo, Monterrey y Guadalajara podrían tener cinco sufragios y Tepic o Pachuca uno solo.
Naturalmente, la medida es discriminatoria y antidemocrática, contradiciendo el espíritu del sindicato patronal.
Crece Aleatica
Durante el segundo trimestre del año los ingresos por concepto de peaje en las carreteras concesionadas de Aleatica crecieron 9.9%, en tanto en términos anualizados lo hicieron en 8%.
Bajo el marco la utilidad neta consolidada de la firma creció 22.1%, para llegar a 2 mil 145 millones de pesos.
albertobarrancochavarria0@gmail.com