Ignacio Vega Acevedo
, jefe de operaciones del Planetario “Luis Enrique Erro” (PLEE) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) , explicó en qué consiste el evento astronómico que ha tenido lugar esta madrugada, cuando una Superluna y un Eclipse de Luna total aparezcan en el cielo simultáneamente, y habló de los misterios que se esconden detrás de su avistamiento.
A menos de una semana que mayo fenezca, una serie de eventos astronómicos se encargarán de clausurar el mes insólitamente. La última vez que se encontraron la Superluna y la Luna de sangre, como también se le conoce a este eclipse lunar total, fue hace unos seis años, en el otoño del 2015.
El maestro en ciencias, en entrevista con EL UNIVERSAL, expresó que la aparición de una Superluna ocurre cuando la Luna se encuentra más cercana a la Tierra, lo que la hace lucir más grande y luminosa de lo usual. Esta cercanía -dimensionó el experto- oscila entre un 10% y15%, por lo que la impresión de proximidad será ligeramente mayor.
Foto: Jamm Aquino/Honolulu Star-Advertiser via AP
El aspirante a doctor explicó que nuestro satélite natural no gira circularmente alrededor de la Tierra. En cambio, su trayectoria sucede de forma elíptica . Este desplazamiento produce se acerque y se aleje de nuestro planeta a medida que gira y cumpla con su trayectoria mensual.
Durante el 2021 sucederán 12 lunas llenas, a diferencia del 2020 donde hubo 13 de ellas. Sin embargo, la de este 26 de mayo será especialmente importante, ya que cuando la Luna pase por el perigeo -punto de la órbita lunar en el que existe menos distancia con la Tierra-, durante el plenilunio, se detonará el efecto de la Superluna.
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Vega Acevedo expuso que la Superluna también es conocida como “Luna de flor”. Esto se debe a un término acuñado a la cultura norteamericana. En esta época del año florecen las espermatofitas más características de la primavera.
Foto: AP /Petros Karadjias
Así como la Luna de flor, existen otros términos para señalar a los plenilunios que suceden en los otros meses, como es el caso de las Lunas de fresa y de ciervo, que acontecerán en junio y julio respectivamente.
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El experto en fisicomatemáticas negó que la Superluna hubiere sido perceptible en todas las partes del mundo, pues depende del área en donde estemos ubicados para coincidir con el ángulo más favorecedor para su avistamiento.
Sin embargo, reconoció que a diferencia de otros eventos astronómicos, este será uno de los más democráticos, presentándose en las horas nocturnas y durante las primeras horas del amanecer en casi todas las áreas pobladas por humanos.
Foto: TAUSEEF MUSTAFA / AFP
¿Nos hemos perdido de la Luna de sangre?
Por otra parte, el catedrático de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) señaló que, pese a que la Superluna y la Luna de sangre acaecen de manera sincrónica, el Eclipse lunar fue visible tan sólo por un par de minutos de la madrugada , es decir que la noche de este 26 ya no tendremos la oportunidad de observarla.
Ignacio Vega señaló que si bien el Eclipse de Luna fue perceptible en un momento del anochecer, la llegada de las horas matutinas impidió apreciarlo en todo su esplendor. Su duración aproximada es de una o dos horas, detalló.
Este evento, esperado desde enero de 2019 cuando ocurrió la última Luna de sangre, es muy apreciado por la comunidad astronómica por la peculiar pigmentación con la que se avista en el firmamento.
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El científico señaló que se le llama Luna de sangre por el color rojizo que adopta. Esta pigmentación es característica y exclusiva de los eclipses lunares totales, que acontecen cuando la Tierra se sitúa entre la Luna y el Sol, tapando la luz solar que, habitualmente, se refleja en el satélite natural.
Foto: AP/Matilde Campodonico
La tonalidad carmesí se debe también a las partículas de polvo, humo y niebla que hay en el cielo. Sin embargo, el estudioso aclaró que el color de la Luna varía dependiendo del lugar en el mundo donde nos situemos, pues hay ocasiones en las que el satélite lunar no luce rojizo, sino que se presenta de color azul.
La explicación de estos cambios de matiz tiene que ver con que el color rojo es capaz de atravesar la atmosfera, como parte del fenómeno de separación de luz solar. Mientras que otros colores no llegan a distinguirse en la superficie. Este siniestro de luz -ahondó el académico- es comprable con lo que ocurre durante el amanecer y atardecer cotidiano.
El investigador declaró que la Luna de sangre fue visible en México pero por un periodo de tiempo muy corto. A pesar que los pronósticos astronómicos aseguraron que sería una de las regiones más favorecidas a la hora de presenciar el evento, hubo otros países que tuvieron mayores oportunidades de captar su presencia en el conticinio.
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Finalmente, el representante del PLEE manifestó que aún no conoce la fecha estimada en la que estos eventos dobles volverán a encontrarse en el cielo, pero exhortó a la población que se reúna esta noche a vivenciar la Superluna de este 2021.
Para ello, Ignacio Vega Acevedo sugirió hacerlo en compañía de la familia, en un tiempo en que la pandemia y el confinamiento nos permite mantenernos en casa, próximos a nuestros familiares más cercanos, pues es una manera de estrechar los vínculos sanguíneos y de apreciar los fenómenos que circundan a nuestro planeta.
El maestro en ciencias también hizo una invitación a la sociedad civil a acercarse a las instituciones que comparten, quincenalmente, los eventos astronómicos que están por avistarse, para prepararse con antelación y disfrutarlos óptimamente. De la misma manera invitó a las madres y los padres de familia a escuchar las preguntas de sus hijos, en torno al universo, y buscar asesoría de estos centros, pues de este modo se fomentará el interés por los fenómenos de la astronomía.
nrv
