Ayer se liberó el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2025, en el cual se incluyen las propuestas de presupuestos para la que será la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, la cual ya fue aprobada por la Cámara de Diputados el miércoles pasado y turnada al Senado de la República.
En el anexo 1, que refiere los gastos programables, en el ramo 38 destinado a Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, se especifica que se destinarán 33 mil 295 millones 924 mil 363 pesos, un ligero incremento en comparación con el presupuesto de 2024 para el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).
En el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2024 se especificó que el monto destinado a Conahcyt fue de 33 mil 170 millones 745 mil 272 pesos, 125 millones 179 mil 91 pesos menos que lo propuesto para 2025.
Sin embargo, las proyecciones de inflación para cerrar el 2024 apuntan a más del 4%, por lo que el ligero aumento para la nueva Secretaría de Ciencia no compensa la inflación acumulada.
En el Análisis Administrativo Económico de la Secretaría de Hacienda se detalla el presupuesto de las entidades que conforman el ramo 38 (Ciencia y Tecnología). En casi todas las entidades hubo reducciones, excepto en el monto para el propio Conahcyt, que recibiría, para 2025, 26 mil 377 millones 017 mil 492 pesos. En 2024, esta misma entidad recibió 25 mil 722 millones 398 mil 901 pesos.
También destaca el Centro de Investigación y Docencia Económicas, que recibiría 418 millones 82 mil 214 pesos, una reducción de más de 38 millones de pesos en comparación con lo aprobado para 2024.
Otro caso es el Instituto de Ecología, que recibiría 305 millones 858 mil 675 pesos en 2025, contra los 330 millones 436 mil 184 pesos que le fueron asignados para este año.
Un caso más es el Centro de Investigación en Información Geoespacial, que podría pasar de 72 millones de 610 mil pesos en 2024 a 67 millones 791 pesos, una reducción de más de 5 millones de pesos.
La investigadora Brenda Valderrama apunta que, con estas proyecciones de cifras, la nueva Secretaría de Ciencia “no contará con los recursos necesarios para solventar el déficit del Sistema Nacional de Investigadores, y mucho menos para el incremento de facultades que le conferirá la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal con respecto a sus universidades, a no ser que el presupuesto para universidades lo canalicen a través de la SEP”.