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Algunas conductas como el juego, las compras, el sexo, el ejercicio, el trabajo o mirar series en móviles pueden desencadenar adicciones comportamentales , también llamadas adicciones sin sustancia.
“Aunque la seriefilia o adicción a las series no está reconocida en los manuales de psiquiatría como una adicción, comparte características con esa enfermedad como la conducta compulsiva, la tolerancia y el síndrome de abstinencia ”, explica la doctora Gabriela Orozco Calderón, jefa del Laboratorio de Psicobiología y Cognición Humana en la Facultad de Psicología de la UNAM.
Al principio, este comportamiento tiene un efecto placentero al aumentar los neurotransmisores como la dopamina, relacionada con la motivación y la recompensa, los opioides relacionados con la euforia y la serotonina, que afecta nuestro estado de ánimo y comportamiento.
Con el paso del tiempo, una persona adicta si no está viendo constantemente “su serie” o no puede dedicarle mucho tiempo, comienza a sentirse ansioso, irritable y sufre de craving, que es el deseo intenso por verla.
Del placer a la ansiedad
El permanecer “enganchado” viendo series tiene múltiples consecuencias en la vida de la persona: hay mala alimentación porque se prefiere comprar o preparar algo rápido para no perder el hilo.
Se acentúa el sedentarismo y se dejan de hacer actividades que antes se hacían como salir con amigos o hacer ejercicio , ocasionando problemas cardiacos o de obesidad. Además, los “maratones” ocasionan problemas en la higiene del sueño, alterando el organismo y sus funciones.
Para tratar esta y otras adicciones comportamentales, se ha emplea la terapia cognitivo conductual, donde se genera conciencia emocional en el paciente para limitar el comportamiento adictivo. Además el paciente adquiere estrategias de autocontrol. En ocasiones se recurre a antidepresivos y otro tipo de fármacos, precisa la doctora Orozco.
Por lo general, las personas que pueden desarrollar adicción a las series son aquellas que buscan la novedad, tienen una vida social pobre, personalidad impulsiva, problemas de autocontrol, de allí que vean un capítulo, tras otro, o que están muy estresadas y usan las series “para relajarse”.
Ciencia UNAM, Dirección General de Divulgación de la Ciencia