Con su trineo a cuestas, una manada de perros camina hacia una lejana cordillera en el noroeste de Groenlandia.
En la impresionante imagen, que se ha vuelto viral, parece como si los animales y el trineo atravesaran un piscina poco profunda de agua azul cristalina. Debajo de sus pies, una capa helada de 1,2 metros de espesor.
La semana pasada, las temperaturas en Groenlandia se dispararon tan por encima de los niveles normales que aproximadamente la mitad de la superficie de la capa de hielo se derritió.
El hielo marino alrededor de la isla también se ha visto impactado por el aumento de las temperaturas.
Steffen Olsen, un científico del clima del Instituto Meteorológico de Dinamarca (DMI), es el autor de la imagen capturada el 13 de junio cuando estas condiciones de calentamiento alcanzaron su punto máximo.
La foto fue tomada mientras Olsen y sus compañeros intentaban recuperar su equipo de trabajo de una estación meteorológica, localizada en el área del fiordo de Inglefield, en el noroeste de Groenlandia.
Comunidades dependientes
Rasmus Tonboe, colega de Olsen, compartió la imagen en Twitter y les explicó a sus seguidores que lo que veían era producto de un "derretimiento rápido".
Debido a que el hielo marino es compacto y casi sin grietas, la imagen da la impresión de que los perros caminan sobre el agua, le dijo a la BBC Martin Stendel, investigador principal del Instituto.
El científico advirtió en su tuit que las comunidades de Groenlandia "dependen del hielo marino para el transporte, la caza y la pesca".
Ese día en particular se calcula que Groenlandia perdió el equivalente a 2.000 millones de toneladas de hielo.
Según el Centro Europeo para la Predicción Meteorológica a Mediano Plazo, las temperaturas se ubicaron alrededor de 22°C por encima de lo normal el día anterior. Y en poblados como Qaanaaq, en el noroeste, se registró un récord para la zona de 17,3°C.
Desde su publicación, la foto de Olsen se ha compartido ampliamente en las redes sociales y ha crecido la preocupación en relación con el deshielo, sus causas y consecuencias.
La capa de hielo de Groenlandia se derrite cada año, y la temporada de mayores temperaturas suele abarcar de junio a agosto. En los meses del verano boreal, típicamente en julio, es cuando el deshielo alcanza su punto máximo.
Este año, sin embargo, los expertos dicen que está sucediendo más "temprano". Así lo expresó en un tuit el grupo estadounidense Capital Weather Gang.
"Es muy inusual tener tanto deshielo, tan pronto en la temporada", le dijo a la BBC William Colgan, investigador principal del Servicio Geológico de Dinamarca y Groenlandia.
"Esto requiere condiciones muy raras, pero que cada vez son más comunes".
El impacto del cambio climático
Colgan comparó este deshielo con el ocurrido en 2012, año en que se registró un récord en la pérdida de la capa helada de Groenlandia. Según el investigador, se piensa que tanto el deshielo registrado el pasado 13 de junio como el histórico evento de 2012 fueron causados por los mismos dos factores.
Uno de ellos es la alta presión alojada en Groenlandia, que propicia un clima más cálido y soleado. El otro se explica por las nubes bajas y la caída de nieve, lo que puede causar que la radiación solar golpee la superficie de la capa de hielo.
El calentamiento global, asegura Colgan, tuvo un impacto "tremendamente importante" en estos eventos.
"Lo que está haciendo el cambio climático es agregar más peso a la configuración de las condiciones climáticas, que pueden volcar las capas de hielo en estos eventos de pérdida de masa", dijo.
Si estas tendencias persisten, Groenlandia podría experimentar una récord de deshielo este año, dice el profesor Edward Hanna, un científico del clima de la Universidad de Lincoln.
"La cosa es que, como hemos visto en los últimos 20 años, a medida que las temperaturas suben y suben en Groenlandia, no se necesita un evento tan excepcional para derretir toda la superficie del hielo", le explica a la BBC.
Hanna advierte que las consecuencias de esto no solo se sentirían a nivel local, sino también mundial.
A medida que desaparezca el hielo marino, se prevé que las comunidades locales que dependen de él para el transporte, la caza y la pesca sufran. A nivel global, el profesor dice que "el aumento del nivel del mar es el mayor riesgo".
"Estamos perdiendo alrededor de 250 mil millones de toneladas de hielo al año, como promedio. Una gran masa se está transfiriendo de la tierra hacia los océanos".
Mientras tanto, Colgan dice que debemos tener en cuenta que el derretimiento del 13 de junio fue solo "un evento de un día que es sorprendente en su magnitud y su temprano inicio".
Como demostraron los estudios, explica, el calentamiento global podría hacer que se produzcan eventos más extremos de deshielo.
"Se espera que veamos más de estos en el futuro", expone.