El tabaquismo
aumenta el riesgo de desarrollar Alzheimer , afirmó la Investigadora de la Universidad del Valle de México (UVM) y de la Universidad de Montana, Lilian Calderón Garcidueñas en ocasión del Día Mundial Sin Tabaco que se celebra este 31 de mayo.
La especialista que ha realizado investigaciones en el tema en los últimos 15 años, destacó que la asociación entre fumar y los efectos negativos cerebrales no son simples , ya que los factores genéticos y ambientales son críticos en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.
Mencionó que el estrés oxidativo está asociado con las emisiones de cigarrillos y sus efectos sinérgicos con las exposiciones a la contaminación del aire, además lo convierte en un mecanismo potencial que promueve la patología de Alzheimer.
Agregó que el daño es aún mayor para un fumador que vive en un ambiente contaminado. Como consecuencia, un fumador tiene un metabolismo de glucosa más bajo, déficit de memoria y de atención, y lento aprendizaje comparado con un individuo que nunca ha fumado.
En un comunicado emitido por la UVM, se informó que Calderón Garcidueñas publicó el artículo “Tabaquismo y estrés oxidativo cerebral y contaminación del aire: una ecuación terrible con la materia particulada involucrada y una razón más poderosa para no fumar ¡Cualquier cosa!”, en la revista internacional multidisciplinaria Journal of Alzheimer's Disease.
La académica universitaria afirmó que tanto los cigarros de tabaco como los electrónicos , son una forma efectiva de inhalar cantidades significativas de material que provoca e strés oxidativo cerebral y neurodegeneración.
Las partículas de tamaño nanométrico ocasionadas por contaminación ambiental están presentes en las células cerebrales del área prefrontal, y a medida que son más pequeñas las partículas, mayor es la capacidad de producir especies reactivas de oxígeno y acceder fácilmente al sistema nervioso central.
Consideró importante comprender el impacto de las exposiciones diarias a estas partículas y las consecuencias a la salud. Cada día, agregó, se exponen millones de niños, adolescentes y adultos jóvenes a altas concentraciones de material particulado en el rango ultra fino.
Precisó que esta exposición es voluntaria o involuntaria, por lo que es un problema de atención urgente para el sector salud.
Agregó que el daño es aún mayor para un fumador que vive en un ambiente contaminado. Como consecuencia, un fumador tiene un metabolismo de glucosa más bajo, déficit de memoria y de atención, y lento aprendizaje comparado con un individuo que nunca ha fumado.
akc