A nivel federal, la Secretaría de Salud debería estar trabajando en la difusión de material divulgativo sobre el eclipse anular de sol que ocurrirá el próximo 14 de octubre; la Secretaría de Educación debería estar, de manera intensa, repartiendo información sobre el eclipse en las primarias y la secundarias; Turismo tendría que disponer de un plan ante este tipo de eventos que atraen visitantes nacionales y extranjeros, a las zonas donde se podrá ver completo; Gobernación tendría, también, que trabajar de forma exhaustiva, así como el Congreso de la Unión. “Pero aparentemente no hay un gran interés”, afirma José Franco, del Instituto de Astronomía (IA) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) e integrante del Comité Nacional de Eclipses México.
Eclipses México es una gran red de investigadores, divulgadores científicos y representantes de instituciones, en la que participan miembros de la sociedad civil y astrónomos aficionados que, desde el año pasado, se ha dedicado a difundir material sobre los dos eclipses de sol que habrá en México y entre los que hay seis meses de diferencia; el primero será el próximo 14 de octubre, y se trata de un eclipse anular de sol, cuya ruta es trazada por Franco: primero baja por Texas y a la altura de Corpus Christi sale hacia el Golfo de México y vuelve a entrar al continente a la altura de Campeche; de allí baja hacia Calakmul y Chetumal, y luego Centroamérica, Colombia y Brasil, por donde sale hacia el Océano Atlántico.
“Pasa muy cerca de Mérida”, abunda el físico mexicano, mientras que Daniela Tarhuni, encargada del Comité de Eclipses de Yucatán, explica que justo en ese estado la visibilidad que se alcance será entre el 85 % y el 90 %, puesto que al ser un eclipse anular no puede llegar al 100 %, lo cual no resta que sea bastante amplia la visibilidad en Campeche, Quintana Roo e incluso la Ciudad de México, donde se podrá ver hasta casi en un 70%.
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Será alrededor de las 9:35, hora de la Ciudad de México, cuando se le pueda empezar a ver, con su máximo a las 11:09 para terminar a las 12:50, explica Brenda Arias del Instituto de Astronomía de la UNAM, quien organiza junto a la Coordinación de Difusión, un evento masivo, no sólo para la comunidad estudiantil universitaria, sino para el público general, en las Islas de Ciudad Universitaria: con carpas temáticas, actividades de divulgación científica, talleres, conferencias, voluntarios capacitados para la observación segura. Se calcula que para las actividades que realizarán en la UNAM hay 500 personas trabajando en ello.
En lo concreto, el trabajo de la UNAM en torno al eclipse es una confirmación de las palabras de José Franco, en las que no se omite que sí ha habido una participación activa con gobiernos estatales, principalmente de los tres estados donde se podrá apreciar con mayor amplitud este fenómeno astronómico. En el caso de la UNAM hay colaboración con la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México, quien llevará su Planetario Móvil a las Islas de CU.
Así también Eclipses México y la UNAM mandaron a hacer lentes que serán regalados en los eventos que se realizan no sólo en CU, sino en las sedes de Mérida y Morelia; se trata de 8 mil unidades, de las cuales 4 mil se darán en la capital del país y podrán conseguirse el 14 de octubre en las Islas. Pero esto es sólo una muestra de una gran red de trabajo que articula Eclipses México. Vale la pena señalar que tanto el Instituto Politécnico Nacional (IPN) como la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) han hecho lo propio en la repartición de lentes, para el público general y para su comunidad estudiantil.
Eclipses México buscó a autoridades de la Secretaría de Salud para trabajar en conjunto y no obtuvo respuesta. Lo que confirma que la red de actividades para difundir un fenómeno astronómico de este tipo se realiza entre los enlaces de los gobiernos estatales, siendo Yucatán uno de los más activos no sólo por su agenda cultural y de divulgación, y hasta en la innovación, pues dispondrán de 14 dispositivos Lighstound para que personas con debilidad visual se acerquen al fenómeno; equipos que fueron donados por Harvard.
Una serie de trabajos en los que apoyaron los brazos gubernamentales del estado de Yucatán. En el caso de la UNAM, durante todo el día 14 de octubre, dispondrán del Planetario Móvil en las Islas; mientras en la Universidad Autónoma Metropolitana instalará un punto de observación para todo público, en el Bosque de Tláhuac.
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Unión científica
En la red de Eclipses México confluyen instituciones de amplio prestigio como el Instituto de Astronomía (IA), el Instituto de Radioastronomía y Astrofísica (IRyA) y la Escuela Nacional de Estudios Superiores Unidad Mérida (ENES), de la UNAM; el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), la Red Nacional de Consejos Estatales de Ciencia y Tecnología (REDNACECyT), la Red de Planetarios de Quintana Roo, el Planetario de Torreón, la Noche de las Estrellas (NdE), los Coordinadores Nacionales para la Enseñanza de la Astronomía (NAECs) de la Unión Astronómica Internacional y Kosmos Scientific de México. La UAM, la Ibero y el Instituto Politécnico Nacional también tienen presencia en la red.
En este caso, por ejemplo, Kosmos Scientific ha sido pieza clave para la repartición de filtros. Vale la pena señalar, que si bien hay instancias participantes como la sede Campeche del Colegio de La Frontera Sur (ECOSUR), que es parte del Sistema de Centros Públicos de Investigación, y el Inaoe en Puebla, y Sonora, las cuales dependen del gobierno federal, no hay un contacto directo con la federación.
La buena voluntad de los integrantes de Eclipses México ha creado también una red de capacitación, cuenta otro de sus integrantes, Raúl Mújica, en la que han brindado capacitación a cinco mil profesores y divulgadores de la ciencia de todos los niveles, de prácticamente todo el país (faltan sólo cuatro Estados para capacitación). Red que se ha multiplicado y un ejemplo central es el de Campeche, donde Yuri Peña, de Ecosur, ha coordinado las actividades de divulgación en las que a su vez han llegado a cinco mil profesores.
La mayoría de los entrevistados coinciden en la importancia de las formas indirectas de ver el eclipse y en el cuidado a la hora de conseguir filtros de observación. Las principales marcas que cuentan con la certificación ISO son Celestron y Kosmos. Señalan que hay que tener mucho cuidado con la charlatanería en este tipo de productos, puesto que observar un eclipse sin protección puede causar afectaciones graves a la vista a mediano y largo plazo. Recomiendan acudir a los centros de observación que habrá: el Bosque de Tláhuac, el Planetario Luis Enrique Erro, por parte del IPN, y las Islas de CU.
Pocas veces México tiene oportunidad de tener dos eclipses de Sol con una cercanía tan estrecha; eventos trascendentes que gracias al esfuerzo y el compromiso de los investigadores con la sociedad civil pueden ser reconocidos por su trascendencia.
José Franco aplaude la iniciativa del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en la generación de contenidos al respecto, y recomienda la revista Obsidiana, de descarga libre obsidiana.digital y micrositios como el de la UAM: /conocimiento.uam.mx/eclipse.
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