La agencia espacial alemana acaba de publicar un espectacular mapa en 3D que muestra la Tierra como nunca antes la habías visto.
El mapa fue elaborado por la DLR (siglas en alemán de la agencia) con imágenes captadas por dos satélites de radar que trazaron las variaciones de altura a lo largo de más de 148 millones de km cuadrados.
Es posible acceder de forma gratuita al mapa, que DLR colocó a disponibilidad de cualquier científico que quiera utilizarlo.
Las aplicaciones del mapa son innumerables, desde la previsión del curso de aguas durante inundaciones a la planificación de grandes proyectos de infraestructura.
Los dos satélites utilizados en el proyecto son TerraSAR-X y TanDEM-X.
Como todas las naves de radar, envían pulsos de microondas hacia la superficie del planeta y miden el tiempo que le lleva a estas señales volver al satélite.
Cuanto más breve sea el intervalo mayor será la altitud del terreno.
TerraSAR-X y TanDEM-X vuelan prácticamente lado a lado y a veces se encuentran a apenas 200 metros de distancia.
El trabajo conjunto requiere una coordinación compleja, pero significa que ambos satélites tienen una "visión estereoscópica".
Esto significa que las naves operan en modo interferométrico, con una que funciona como transmisor/receptor y otra como un segundo receptor.
La resolución del modelo digital de elevación, DEM por sus siglas en inglés, es 90 metros. En otras palabras, la superficie terrestre fue dividida en cuadrados de 90 metros de lado.
En esos cuadrados, la precisión absoluta de la dimensión vertical es de un metro, lo que hace a DEM un mecanismo poderoso de representación de las variaciones en el terreno.
Hay otros modelos con mayor resolución, pero este nuevo mapa supera a todos los globales y de libre acceso.
La agencia espacial alemana tiene otras versiones del mapa con resoluciones de cuadrados de 30 y 12 metros, pero que por ahora tienen restricciones comerciales.
TerraSAR-X y TanDEM-X continúan actualmente su tarea de mapeo.
Tener un DEM estático es un gran avance, pero la superficie terrestre cambia constantemente y esto también debe ser captado.
Los dos satélites son bastante vetustos. TerraSAR-X fue lanzado en 2007 y TanDEM-X en 2010.
DLR espera que las naves continúen funcionando por varios años, pero los planes para sustituirlos están avanzados.
La futura misión será diferente de la actual porque los instrumentos de radar no operarán en la banda X, sino en la banda L, una longitud de onda mayor.
Eso facilitará diferentes tipos de aplicaciones. "En los bosques, por ejemplo, con la banda X sólo es posible captar la copa de los árboles", explicó a la BBC Manfred Zink, del Instituto de Microondas y Radar de la agencia espacial alemana.
"No puedes penetrar esa copa y ver debajo de las hojas. Pero en la banda L penetraremos el bosque hasta llegar al suelo. Y eso nos permitirá ver el volumen de vegetación en 3D y realizar una tomografía".
"Podremos ver la estructura vertical completa del bosque, lo que es clave para una estimación precisa de la biomasa".
La cantidad exacta de carbono atrapado en los bosques del mundo no se conoce, pero saberlo es vital para los estudios sobre cambio climático.
Otra aplicación de las observaciones en la banda L es calcular mejor las deformaciones del terreno durante un terremoto.
Los científicos ya estiman esos cambios con satélites de radar que funcionan en otras longitudes de onda, pero sus observaciones pueden ser difíciles de interpretar cuando hay mucha vegetación.
El nuevo sistema, que será llamado TanDEM-L, intentará superar esas dificultades.