La basura es uno de los mayores problemas ambientales de la Ciudad de México y, ante esta situación, el pasado 8 de julio, el gobierno puso en marcha la Norma Ambiental de Separación de Residuos , con la que se busca disminuir la cantidad y el volumen de basura que todos los días llegan a los rellenos sanitarios.
El primer esfuerzo de las autoridades locales por minimizar la problemática de la basura se dio en el 2004, cuando la Ley de Residuos Sólidos del Distrito Federal obligaba a que los habitantes entregaran al camión recolector la basura separada en orgánica e inorgánica. No obstante, fue en el 2010 cuando se implementó una estrategia de recolección organizada en varias colonias de la Ciudad, con lo que se logró que aproximadamente el 50% de los residuos fueran separados adecuadamente.
¿Resultados?
De acuerdo con David Torres, gerente de ventas de Aseca S.A., empresa que brinda servicios de manejo integral de residuos peligrosos y no peligrosos, apegados a la legislación ambiental , esta medida es un buen mecanismo para la reducción de basura, y aunque ha tenido buen impacto, todavía hay mucho que trabajar para concientizar a toda la ciudadanía, además de las empresas.
“Lo que pasó con esta norma es que lo inorgánico se separó entre reciclable y no reciclable y entró un nuevo elemento, una nueva separación que es manejo especial y se refiere a los residuos voluminosos : un colchón, un mueble, llantas; es decir, residuos que no entran en esas separaciones, ni orgánico ni inorgánico, tampoco material reciclable propiamente, como el cartón, por ejemplo: el pet, el aluminio y el vidrio”, señala.
El ejecutivo explica que a ellos, como empresa privada, les toca continuar con esa medida que han tomado las autoridades referente a la separación de residuos , pero quien finalmente se encarga de ésta son los generadores, porque ellos solo se dedican a transportarla.
“Soy honesto, todavía hay algunos clientes que no llevan una separación efectiva como tal, lo orgánico no es todas las veces residuos totalmente orgánicos. Todavía hay cosas que se tienen que afinar y estamos apoyando la aplicación de la norma y, para esto, nosotros también les podemos proporcionar el contenedor para que desde el origen se separen también los residuos. Todos estamos obligados por esta nueva norma a llevar a cabo la separación. Hay que tener en cuenta también que hay una diferencia entre lo que son los residuos como tal, de los grandes generadores que nosotros atendemos: restaurantes, hoteles y hospitales”, dice.
David Torres añade que, como recolector, se ha dado cuenta de la disminución de la basura , y este resultado se ha logrado porque ahora las empresas separan los desechos reciclables . “Solo nos están entregando residuos orgánicos , y muy poco de inorgánico no reciclable por ejemplo: colillas de cigarro, papel y toallas sanitarias; residuos inorgánicos de comedor, como unicel, y la otra parte, como es el material reciclable, comenzaron a reciclarlo. De esta manera, es muy útil hacerlo, porque al comenzar a comercializar el material reciclable, incluso nosotros así lo promovemos, podemos comprárselo, el pago por ese material separado puede contribuir al pago del servicio de recolección de residuos”, dice.
Añade que el impacto positivo de esta norma ambiental, ya comienza a notarse porque en los rellenos sanitarios “ya estamos entregando un poco más de residuos orgánicos y el inorgánico no reciclable e; el reciclable cada vez más está comenzando a ser separado y comercializado”.
La ciudadanía también recicla
Así como las grandes empresas que han decidido comercializar sus desechos reciclables, parte de la ciudadanía también se ha inclinado por ello, como Fausto Fonseca, habitante de la delegación Azcapotzalco, que ante la norma de separación de residuos, se dio cuenta que separando el pet y el cartón le puede sacar provecho.
“Yo no me daba tiempo de separar la basura, ni me fijaba qué tirábamos, pero ahora como lo tenemos que separar, me di cuenta que lo podíamos vender y obtener algún dinero. No es mucho, 15 o 20 pesos, pero ya sirven para los pasajes. Y como le quitamos todo eso a la basura, pues ya no entregamos mucha, solo la que sale de la comida y del baño”, comenta.
Para Ana Cornejo, de la delegación Cuauhtémoc, la separación de la basura era un tema de urgencia, pues señala que en su colonia, San Rafael, se generan demasiados residuos. “Yo siempre he reciclado lo orgánico de lo inorgánico, pero no todos mis vecinos lo hacían, y ahora me he dado cuenta que sí lo hacen, esperemos que esta medida sea de gran beneficio”, indica.
Esta norma busca reducir al máximo, las casi 13 mil toneladas de residuos que se generan diariamente en la Ciudad.
Norma Ambiental de Separación de Residuos
La nueva Norma Ambiental NADF-024, establece los criterios con los que a partir de julio pasado, se debe separar la basura para su recolección. Obliga a los habitantes de la Ciudad a entregar su basura bajo una clasificación: orgánicos, inorgánicos reciclables, inorgánicos no reciclables y manejo e special.
Ventajas de la separación de residuos, de acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente (SEDEMA):
*Maximiza el reciclaje de los residuos sólidos
*Reduce las emisiones de gases efecto invernadero
*Limita la degradación de los recursos naturales
*Disminuye el volumen de residuos
*Fomenta la creación de mercados de materiales reciclables y centros de acopio
*Promueve la creación de un padrón de centros de recolección y transporte de residuos
*Autoriza planes de manejo para la gestión adecuada de residuos especiales
*Establece cantidades y tipos de residuos que ingresen a los Centros de Trasferencia
*Fomenta la producción de composta que fertiliza parques y jardines
*Dignifica el trabajo y reduce riesgos de la salud del personal de las plantas de selección.
jpe