Los astronautas veteranos Barry ‘Butch’ Wilmore y Sunita ‘Suni’ Williams han pasado 63 días en el espacio, tras pilotar el primer vuelo de prueba de la nave espacial Starliner de Boeing. Debido a problemas técnicos con el cohete, podrían pasar la Navidad y sus cumpleaños en la Estación Espacial Internacional (EEI).
Este miércoles, la NASA reveló que está evaluando la posibilidad de traerlos de vuelta a la Tierra en febrero de 2025, a bordo de la cápsula Dragon de SpaceX o de una nave Soyuz rusa, aunque aún no se ha establecido una fecha exacta.
La agencia detalló que, si se opta por utilizar la cápsula Dragon, la decisión se tomará a mediados de este mes. En tal caso, se podría enviar la Crew 9 el 24 de septiembre hacia la EEI con dos pilotos a bordo, en lugar de cuatro como es habitual en las misiones de rotación de tripulantes. Wilmore y Williams ocuparían los otros dos asientos y tendrían que permanecer otros seis meses adicionales en el espacio.
“Tenemos un marco de tiempo muy complicado y estamos trabajando a fondo con todas las entidades implicadas, incluyendo los equipos de Boeing, NASA y SpaceX”, dijo Steve Stich, gerente del Programa de Tripulación Comercial de la NASA.
Se plantea que se tomará la mejor decisión en el momento indicado, siendo el primer escenario que los astronautas regresen en la Starliner, aunque también se está elaborando otros planes de contingencia.
Williams y Wilmore debían regresar a la Tierra el 14 de junio, ocho días después del lanzamiento desde el Centro Espacial Kennedy en Florida. Sin embargo, se produjeron fallos en los propulsores y pequeñas fugas de helio en la Starliner que impidieron realizar la primera etapa del vuelo con éxito.
Mientras tanto, los ingenieros de la NASA y de Boeing continúan realizando pruebas en los propulsores de la Starliner en White Sands, Nuevo México, para entender la causa principal de su degradación. La agencia espacial confirmó previamente que se encontró un exceso de calor alrededor de algunos de los propulsores, lo que estaba causando que los sellos de teflón se inflaran, restringiendo el flujo de propulsor y desencadenando los problemas en los propulsores.
La NASA siempre ha considerado el regreso de Williams y Wilmore en una nave SpaceX como una contingencia de la misión, pero el objetivo principal es traer a los dos astronautas de vuelta a casa en la Starliner.