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Toluca, Méx.— El ayuntamiento de Toluca y el gobierno del Estado de México no se pusieron de acuerdo en la estrategia para la clausura de giros negros en territorio municipal de la zona oriente, situación que preocupa a autoridades locales porque no tienen las facultades legales para intervenir, por ejemplo, en delitos como trata, informó el director de Desarrollo Económico, Luis Felipe García Chávez.
“Sí hubo comunicación con ellos pero no se concretaron acciones coordinadas para la clausura. Planteábamos que entrara la Guardia Nacional o la Fiscalía General de Justicia estatal, además de operativos conjuntos donde fuéramos Jurisdicción Sanitaria, Profeco, Desarrollo Económico, Medio Ambiente, para revisar de manera integral algunos comercios”, dijo.
Sin embargo, el gobierno del estado, a través de Jurisdicción Sanitaria, que es la Secretaría de Salud, hizo sus recorridos de manera independiente y pese a que clausuraron algunos, siguen operando más, pero ya no nos incluyeron.
El funcionario municipal informó que persiste la operación clandestina de negocios y el ayuntamiento no puede intervenir en denuncias de trata de personas, además, las acusaciones llegan primero a la autoridad local por ser la primera en contacto con la gente.
“Donde se concentran los giros negros es la zona de San Lorenzo Tepaltitlán, en la vialidad estatal López Portillo y, lo que nos enfrentamos fue que tenemos pocos verificadores para revisar las unidades económicas de todo el territorio municipal. Necesitamos verificadores, en mi dirección hay menos de 20 y necesitamos 100; en total para todas las áreas se requieren 700, incluidos quienes revisan comercio ambulante”, precisó.
Explicó que persisten los bares clandestinos, sobre todo espacios que adaptan en viviendas o negocios, donde expenden sobre todo cerveza, y por ello la dependencia realiza “tiros de precisión”, visitas directas con base en las denuncias ciudadanas que reciben.
“Sobre todo aparecen los fines de semana y los días de partido de futbol, por ejemplo en áreas donde hay canchas deportivas para partidos llaneros, ahí colocan mesitas adaptadas, con sus cartones de cerveza y se ponen a vender. En las fiestas patronales, casi siempre son cervezas”, dijo.
García Chávez afirmó que revisan todo tipo de establecimientos para asegurar que cumplen con la reglamentación municipal y que ninguno sea un peligro para los consumidores, sobre todo buscan impedir negocios semifijos que expenden alcohol en la calle.
El presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes (ASBAR), Patricio González Suárez, refirió que tratan de propiciar una cultura de consumo responsable de bebidas alcohólicas entre los jóvenes y los empresarios del sector, ya que no se trata sólo de “vender por vender”, sino que la gente aprenda a disfrutar la fiesta sanamente.
