El país necesita agilizar la agenda de digitalización para garantizar su crecimiento económico, dijo Carlos Funes, presidente de la de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti).
“México, como segunda economía de América Latina y segundo socio comercial de Estados Unidos, debe acelerar su agenda de digitalización e innovación en todos los sectores para garantizar así la base de su futuro crecimiento económico”, subrayó durante la asamblea anual de la cámara.
A dos años de que inició la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, se desconoce la Agenda Digital Nacional (ADN), aunque cuenta con una oficina que depende del Ejecutivo federal.
Durante su intervención, Emiliano Calderón, coordinador de la Agenda Digital Nacional (ADN), dijo que ya concluyó la elaboración de contratos marco para la contratación de la mayoría de los servicios de tecnología, “que termina con la mala práctica de contratar de manera arbitraria, a una empresa en particular”.
Con los contratos marco se da una igualdad de condiciones, imparcialidad y son abiertos a todos los competidores, ahondó.
“El resultado de los contratos marco fue un esfuerzo de todos, y agradecemos particularmente a los integrantes de esta cámara, por contribuir a desarrollar
especificaciones técnicas que permitieron estandarizar los componentes tecnológicos y el precio entre los bienes o los servicios similares”.
Por otra parte, dijo que buscan contratar empresas pequeñas y medianas para que estén en las mismas condiciones de contratación de las grandes compañías.
Funes, quien fue reelegido como presidente de la Canieti, destacó que la aceleración digital es responsabilidad de las empresas, pero debe estar acompañada y apoyada por las diferentes instancias públicas.
“Contar con un regulador independiente, especializado y técnico que sea capaz de reforzar el rol del Estado en el desarrollo de las telecomunicaciones”, indicó.
Durante su participación, Adolfo Cuevas, presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), dijo que el respeto irrestricto al Estado de derecho es la piedra angular de las posibilidades de desarrollo de la nación.
“El respeto de las instituciones que derivan de la Constitución, de la ley, más allá de contingencias políticas, es un prerrequisito indispensable para cimentar una ruta de progreso”, agregó.
La crítica destructiva de las instituciones, al margen de mecanismos legales de contrapeso, debilita al Estado mexicano y constituye un lastre al progreso, ya que puede minar el pleno ejercicio de facultades conferidas a las instituciones, señaló Cuevas.
“Corremos el riesgo de que el presente sea un sexenio perdido en lo económico”, alertó el presidente del IFT, pues el año pasado el PIB nacional cayó 8.5% y en 2019 también se había contraído en medio punto porcentual.
Sin embargo, destacó la fortaleza del sector de telecomunicaciones por su solidez estructural, que lo revitaliza y da viabilidad a otras industrias.
“El sector de telecomunicaciones, por ejemplo, creció en 2020 arriba de un punto porcentual, en tanto que la economía general
del país se hundía más de 8%”, dijo Cuevas.