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maria.saldana@eluniversal.com.mx
La renegociación del Tratado de Libre Comercio de la Unión Europea y México (TLCUEM), que puede quedar lista en abril de 2019, finalmente consideró la protección de 41 quesos europeos, cuyos nombres no se podrán usar como el Parmigiano Reggiano, Camembert y Mozzarella, entre otros, mientras que México solamente se reservó el Cotija, afirma el comisario europeo de agricultura y desarrollo rural, Phil Hogan.
Con un “acuerdo razonable” que protegió sensibilidades de diversos agroalimentos europeos y mexicanos, con la desaparición paulatina de aranceles y la eliminación de cuotas, el funcionario europeo espera un mayor intercambio comercial.
Afirma que en abril de 2019 puede cerrarse en definitiva la renegociación del TLCUEM con la posibilidad de que se firme a fines de ese año para una entrada en vigor en 2020, con lo que habrá mayor apertura.
En entrevista con EL UNIVERSAL, durante su visita a México, explica que una vez listo el documento, se traducirá en los 24 idiomas de la Unión Europea para que los 28 miembros tengan el texto.
Aunque los acuerdos que se tienen hasta el momento entre el bloque europeo y México se hicieron públicos, porque “somos transparentes y abiertos”.
“Esto toma un poco de tiempo y podemos aprovechar el tiempo, porque se tendrán las elecciones [para elegir al parlamento europeo] así que deseamos que para cuando se termine el proceso se tenga la traducción. A fines de 2019”, afirma.
En cuanto entre en vigor se espera la eliminación de aranceles a productos agrícolas que antes tenían cuotas, pero además de la parte comercial del acuerdo con México hay dos partes más: una de cooperación y otra política, en los que están derechos humanos y diálogo político.
Añade: “Es una gran oportunidad para que la regulación de las compras públicas que se acordó traiga beneficios para México” y en la medida en que no se tengan mayores dificultades en la implementación se verán los beneficios.
Explica que se respetaron las sensibilidades de productos agroalimentarios de los socios comerciales y por ello si bien se tenía una larga lista de 340 nombres de quesos europeos, vinos y carnes frías que se pidió no usar en México por tener una protección intelectual, llamada indicaciones geográficas, finalmente se acordó una lista de 41 quesos y otro grupo de vinos y cárnicos.
“Es un enorme asunto para los europeos porque tiene que ver con productos que se fabrican en áreas locales, que tiene que ver con cultura, formas de hacer las cosas en la región, herencia, temas icónicos, como Champagne, Cognac, vinos; quesos como el Parmigiano Reggiano, Manchego, son temas políticamente difíciles. Así que tuvimos un razonable acuerdo con México”, dice.
En 2017, el comercio creció 15% para todo tipo de productos y fueron 61.7 mil millones de euros los que México exportó hacia el bloque.