México no ha logrado recuperarse del golpe de la pandemia de Covid-19 en 12 actividades que concentran 25% del Producto Interno Bruto (PIB), revelan los datos publicados por el Inegi.
Entre las actividades con el mayor rezago destacan los servicios de apoyo a los negocios y manejo de residuos y desechos, con un desplome de 72.1% en los últimos dos años, debido en parte a la reforma laboral que prohibió la subcontratación.
Le sigue la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, cuya producción se encuentra 24.9% por debajo del nivel alcanzado en 2019.
La tercera industria con el mayor rezago es la relacionada con la fabricación de textiles y procesamiento del cuero, con un déficit de 11.1%, lo que se explica, en parte, por la competencia desleal de productos importados y la contención de la demanda interna.
Otro segmento que no ha logrado superarse es la construcción, con un rezago de 10.4%, aun cuando en el último trimestre de 2022 repuntó gracias a menores presiones inflacionarias en el sector, continuos esfuerzos en proyectos de infraestructura pública y la inversión relacionada con el nearshoring.
“La construcción va a estar lateral, yo no veo una recuperación fuerte, cuando empiece a recuperarse ya vamos a estar en desaceleración en el resto de los sectores, entonces probablemente no vamos a tener una recuperación tan importante en el sector”, comentó Adrián Muñiz, subdirector de análisis económico de Vector Casa de Bolsa.
Dijo que los resultados del PIB del Inegi no se deberían festejar, pues recuperar el nivel antes del Covid no es lo más importante, sino retomar la tendencia previa, es decir, que la economía se coloque en la trayectoria que hubiese tenido sin la crisis sanitaria.
Hay actividades que no han recuperado los niveles previos a la pandemia debido a factores muy particulares, pero en general México tardó mucho para recobrar el terreno perdido, más que otras naciones, destacó.
Desde su perspectiva, recuperar la tendencia previa a la pandemia tomaría un par de años más, lo que significa que habrá cuatro o cinco años perdidos en materia de crecimiento económico.
La razón, explicó, es que la política económica durante la pandemia no se alineó, debido a que el banco central reaccionó disminuyendo su tasa de interés de manera agresiva y la Secretaría de Hacienda no lo acompañó, “le faltó una reacción más decidida de la política fiscal”, explicó el ejecutivo de Vector Casa de Bolsa.
La economía logró una expansión de 3.1% en 2022, pero para este año hay que tomar en cuenta que la política monetaria será más restrictiva de lo que se esperaba antes, es decir, las tasas se mantendrán altas por más tiempo.
Para Muñiz, la economía podría crecer apenas entre 0.7% y 0.9% en 2023.
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