México sigue afectando el clima de inversión en un entorno en el que la recuperación económica se verá beneficiada por el impulso de Estados Unidos, lo cual es una “bendición” para el país; sin embargo, los cambios en sectores como el energético dificultan un franco crecimiento después del golpe del Covid-19, advirtió el banco suizo UBS.
“México no se está ayudando a sí mismo socavando constantemente el clima de inversión del país. Sigue siendo esencial monitorear las decisiones políticas de México, ya que una mayor radicalización podría poner en peligro la recuperación económica en general”, dijo la firma.
En el documento, El apoyo externo supera la incertidumbre interna, por ahora, UBS detalló los efectos que tendrá la reforma al sector eléctrico, el cual además de afectar inversiones, contraviene acuerdos internacionales, como el Tratado de Libre Comercio entre T-MEC, la Asociación Transpacífica y el Acuerdo de París.
“Si bien los efectos de la ley están actualmente suspendidos por medidas cautelares otorgadas por dos jueces de distrito, no se sabe si la Corte Suprema la considerará inconstitucional.
“Este proceso puede tardar entre tres meses y más de un año en resolverse. Sin embargo, el presidente López Obrador ya dijo que buscará una enmienda constitucional para revertir la reforma energética si la ley es declarada inconstitucional”, destacó UBS.
Ante este entorno, el banco suizo advirtió que la falta de certeza podría provocar la cancelación o el retraso de futuras inversiones privadas en México.
“Sigue siendo esencial monitorear las decisiones políticas de México, ya que una mayor radicalización podría poner en peligro la recuperación económica en general”, expresó.
La firma resaltó que con la economía estadounidense recuperándose con fuerza y respaldando el cambio de rumbo de México, las acciones nacionales deberían mantener una buena oferta, ante lo cual, la firma encontró oportunidades de inversión atractivas en el espacio de renta fija cuasi soberana y corporativa en dólares estadounidenses.
“Hay un dicho atribuido al presidente mexicano Porfirio Díaz que dice ‘pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos’. Esta frase refleja la relación asimétrica de México con su vecino del norte. Compartir una frontera con la economía más grande del mundo conlleva derechos y responsabilidades. Esta vez, la proximidad a Estados Unidos se ha convertido en una bendición, ya que México se beneficiará de un aumento en el estímulo fiscal y crecimiento del PIB”, añadió la institución.