Más Información
Identifican a víctima de ataque armado en el antro DBar en Tabasco; era integrante de un grupo musical
Ataque a DBar en Tabasco tenía como objetivo un cliente, informa Fiscalía; confirman 6 muertos y 10 heridos
Se han registrado más de 9 mil jóvenes para participar en elección judicial: Sheinbaum; "aquí no se raja nadie", dice
Secuestran a participante de MasterChef y a un hombre en la México-Cuernavaca; detienen a uno tras rescate
Elecciones en Uruguay: encuestadoras proyectan como ganador a Yamandú Orsi; obtendría 49.5% de votos
Vinculan a proceso a exfuncionarios del SAT; exmandos son acusados de atentar contra el fisco por más de 170 mdp
cartera@eluniversal.com.mx
Washington.— El gobierno de Estados Unidos decidió, por sorpresa, aplazar la imposición de aranceles a varios productos chinos, entre ellos teléfonos celulares, computadoras, consolas de videojuegos, juguetes y algunos textiles, hasta mediados de diciembre, pausando una nueva escalada en la guerra comercial con China y aliviando la afectación que habría tenido en las compras decembrinas.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que tomó esa acción “sólo para ayudar a varios grupos de gente” y tras una “muy buena plática” con China entre los representantes comerciales.
“Lo estamos haciendo por la temporada de Navidad, por si acaso los aranceles tienen algún impacto en los consumidores de Estados Unidos”, confesó.
Falsamente añadió que las tarifas tienen “virtualmente ningún impacto” en la población.
Por su parte, la oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) justificó que la supresión de varios productos de la lista impositiva se debía a factores “de salud y seguridad”. Estas importaciones serán tarifadas de nuevo a partir del 15 de diciembre, de acuerdo con la nota oficial.
La lista de importaciones excluidas por el momento, de 21 páginas, incluye además de los productos ya mencionados, electrodomésticos como microondas, instrumentos musicales, decoraciones navideñas y productos infantiles, entre otros.
En contraste, se mantienen con aranceles a partir del próximo mes varios productos lácteos, abrigos y trajes de baño, animales vivos y varios tipos de acero.
Hasta ahora, Estados Unidos tenía programada, a partir del 1 de septiembre, la aplicación de aranceles de 10% a importaciones chinas por valor de 300 mil millones de dólares, una escalada definitiva en el conflicto entre ambos países.
El anuncio lo hizo Trump hace un par de semanas, tras acusar a China de no mantener los acuerdos y compromisos de aumentar la compra de productos agrícolas de la Unión Americana pactadas a finales de julio.
“Como siempre, China dijo que iban a comprar ‘mucho’ de nuestros fantásticos agricultores estadounidenses. De momento no han hecho lo que dijeron que harían. ¡Quizá será diferente!”, tuiteó a primera hora de la mañana.
La decisión de ayer fue muy bien recibida entre el sector privado, y la bolsa escaló sobre las pérdidas del lunes. El Dow Jones cerró en números verdes, lideradas por las grandes beneficiadas del alivio tarifario: tecnológicas como Apple rebasaron 4% de subidas.
También aplaudió la decisión la Cámara de Comercio de Estados Unidos. “Son buenas noticias para las empresas y consumidores estadounidenses”, expresó Neil Bradley, vicepresidente ejecutivo de la organización. En su opinión, lo más importante es que las dos partes vuelvan a la mesa de negociación para un acuerdo integral.
En ese sentido, el ministerio de comercio chino anunció que en un par de semanas el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, y el viceprimer ministro de Beijing, Liu He, tendrán una plática telefónica para volver a entablar comunicación y rebajar la guerra comercial entre ellos.
Sin embargo, analistas no ven una solución al corto plazo. “No veo que vayan a llegar a un acuerdo, no a uno integral antes de las elecciones en nuestro país [en noviembre de 2020]”, dijo Gordon Chang, experto en política china.