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Construir el Tren Maya con dinero del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) puede significar la muerte segura para el turismo en el país, opinó Pablo Azcárraga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET).
La idea del Tren Maya es atractiva, pero estamos en desacuerdo con que este proyecto se vaya a financiar con los recursos publicitarios que recauda México a través del Derecho de No Residente (DNR), dijo el empresario en conferencia de prensa.
“Si la totalidad de los recursos por DNR se destinan al Tren Maya, estamos cancelando todas las campañas de publicidad y promoción para el sector turístico por los próximos 25 años, entonces creo que esto es una muerte segura”, expresó Azcárraga.
El CNET y la Universidad Anáhuac anticipan la entrada de 43 millones de turistas internacionales este año y el ingreso de 22 mil millones de dólares por viajeros del exterior.
“Si México detiene la promoción turística nos puede llevar a que caigamos de 43 millones de turistas este año a 20 millones o menos, y que los 80 millones de mexicanos que viajan cada año por el país se vayan a niveles muy por debajo, porque la actividad economía se frenaría”, comentó Azcárraga.
El empresario negó conocer a Gabriela Cámara, propuesta por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador como futura directora del CPTM, y además ve difícil que los empresarios se animen a invertir en el Tren Maya, porque no tendrá una rentabilidad positiva.
El Tren Maya se planteó en el Proyecto de Nación 2018-2024, presentado por López Obrador en noviembre de 2017, el cual contemplaba un trazo de 900 kilómetros.
Sin embargo, el presidente electo informó recientemente que el plan se va ampliar a mil 500 kilómetros para abarcar paradas en Campeche y Yucatán, en adición a las de Quintana Roo, Chiapas y Tabasco.
López Obrador dio a conocer que una parte del financiamiento del Tren Maya correría a cargo del Estado, “con el dinero que se recaudará de los fondos de impuestos al turismo, que alcanzan 7 mil millones de pesos por año”, dejando parte del proyecto en manos de la iniciativa privada.
Desde la perspectiva de Azcárraga, el futuro secretario de Turismo, Miguel Torruco, enfrentará enormes retos que consisten en mejorar la posición de México en el ranking mundial del turismo internacional, así como diversificar el mercado y seguir estimulando la inversión, cuyo crecimiento generó la recaudación de más impuestos.