A pesar de que las vacaciones de Semana Santa se llevaron a cabo en los últimos días de marzo, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) movió a 3 millones 781 mil pasajeros el mes pasado, 8.3% menos contra el mismo periodo de 2023.
Se trata del tercer mes consecutivo a la baja y la caída más profunda de los últimos tres años, concretamente desde marzo de 2021, cuando el tráfico en vuelos comerciales se redujo 11.9% por el cese de operaciones internacionales ante la pandemia, señala información del aeropuerto Benito Juárez.
La reducción va en línea con el objetivo de mitigar la saturación en los edificios del principal aeropuerto del país y de que las aerolíneas opten por el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) para expandirse. Sin embargo, éste atendió sólo a 354 mil pasajeros en febrero, según el último dato disponible.
El AICM detalla que las causas que influyeron en la disminución de actividades este año están el control de que aerolíneas operen sólo vuelos con horario de despegue autorizado y la “reducción de 52 a 43 operaciones por hora, a partir del 8 de enero de 2024, para vuelos nacionales”.
La administración del aeropuerto capitalino pretende reducir a 46 millones de pasajeros el tráfico en 2024, cuando el año pasado recibió a 48.4 millones y tras alcanzar un pico de 50.3 millones de viajeros en 2019, antes de la crisis sanitaria.
En el acumulado de enero a marzo de este año, el Benito Juárez atendió a 11 millones de pasajeros, 5.2% menos que en el mismo lapso de 2023.
“Sin duda las políticas que el gobierno ha implementado tienen injerencia en el menor tráfico del AICM”, opinó Jonathan Félix, analista del sector de aviación en Verum.
La presidenta de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), Diana Olivares, dijo que la reducción temporal de operaciones en el AICM limitó el crecimiento de las aerolíneas y espera que el próximo año, tras realizar mejoras en las terminales, pueda volver a incrementarse porque la demanda natural lo requiere.