La pandemia del Covid-19 ha generado graves consecuencias sobre la industria restaurantera y amenaza con hacer quebrar más negocios y dejar a más personas en desempleo si se vuelve a tener otro confinamiento, advirtió la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
A casi un año del frenón de la actividad económico para evitar el contagio del coronavirus, las cifras de la Canirac muestran que cerraron definitivamente 120 mil unidades en el país, lo que representa 20% de los 600 mil que existían antes de la contingencia sanitaria.
Alertó que un nuevo confinamiento puede hacer desaparecer a 50% de los restaurantes que aún sobreviven, pero sobre todo los pequeños y micro, porque no tienen acceso al financiamiento y operan bajo permanente incertidumbre.
Además, se suma la pérdida de 400 mil empleos.
Sin embargo, la Canirac informó que se tiene el propósito de recuperar 5.6 millones de empleos directos e indirectos que llegó a crear la industria antes de que ocurriera la emergencia sanitaria.
“La urgencia de reactivar este sector tiene que ver con la posibilidad de que algunos de los que ya cerraron puedan reabrir”, detalló.
La Canirac pidió reactivar a la industria restaurantera, para lo que es necesario implementar una estrategia para enfrentar los desafíos actuales y futuros.
“La reactivación del sector repercutirá en la amplia cadena productiva en la que incide y, por consiguiente, favorecerá a miles de productores locales que están detrás de cada restaurante.
“Antes de esta crisis, en un año, la industria restaurantera compraba 100 mil millones de pesos de insumos a productores nacionales”.