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Los medios de ahorro informales prevalecen como la opción preferida de los mexicanos para guardar su dinero. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2018 (ENIF), 53% de la población opta por alternativas como las tandas o simplemente mantener el dinero en su casa.
“Algunas personas optan por recurrir a otros mecanismos para guardar dinero en las cuales no intervengan instituciones financieras formales como el uso de tandas, cajas de ahorro que se organizan en centros laborales o comunidades, comprando bienes que preserven el valor del mismo, o guardando el dinero en casa, a lo cual se le llama ahorro informal”, destaca el documento elaborado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La ENIF detalla que más de 37 millones 250 mil adultos guardan su dinero lejos de los medios formales. En tanto, los datos arrojan que 21% de la población, unos 17 millones de personas, simplemente no ahorran.
En la encuesta, elaborada entre abril y junio del año en curso, se muestra que 35% de la población de adultos, 17 millones, participó en una tanda; 32 millones optaron por guardar el dinero en su casa.
Los mexicanos guardan dinero principalmente para gastos de comida, personales o pago de servicios, atender emergencias e imprevistos y comprar, remodelar o ampliar una casa, comprar terrenos, vehículos, joyas, animales, entre otros. Después de atender dichas necesidades, el ahorro se destina para gastos educativos o de salud, vacaciones o fiestas, y en última opción para la vejez o retiro.
Destaca también que más de 2 millones 2 mil encuestados, 7% de la población, señalaron no tener confianza en las instituciones financieras.
A la par, 1.6 millones de mexicanos explicaron que no ahorran debido a que los intereses son bajos o las comisiones son altas.
Crédito familiar. En el caso del crédito, 37% de la población lo tiene con alguna institución financiera formalmente establecida, esto es 24 millones 637 mil personas.
La encuesta muestra que de abril a junio más de 32 millones de adultos pidió dinero a familiares o amigos.
Así, los mexicanos utilizan el dinero que piden a préstamo para gastos de comida, personales o pago de servicios, así como para atender emergencias e imprevistos.
La población que no tiene un crédito resaltó que la principal razón es que no le gusta endeudarse.