El peso mexicano cerró este viernes en 18.96 unidades por dólar en los mercados internacionales y significó una pérdida semanal de 1.1%.
Tras alcanzar un mínimo de 18.50 pesos durante la mañana del jueves, nivel que no tocaba desde octubre de 2018, la moneda nacional revirtió las ganancias y se acercó ayer al nivel sicológico de 19 unidades.
Hubo una alta volatilidad en los dos últimos días, fluctuando en función de las expectativas de los incrementos a la tasa de interés en Estados Unidos para los próximos meses, explicó Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base.
Al menudeo, el dólar se terminó vendiendo en 19.40 pesos en ventanillas de CitiBanamex, su precio más caro desde el pasado 19 de enero.
“Los incrementos en la tasa aumentan la posibilidad de una recesión en Estados Unidos, o cuando menos de una desaceleración económica, lo cual provocaría menores flujos de dólares a México mediante exportaciones, remesas e inversión extranjera directa. Al llegar menos flujos de dólares, sube el tipo de cambio”, explicó Siller.
Como estaba previsto y a fin de controlar la inflación, la Reserva Federal (Fed) anunció este miércoles que su principal tasa sube 25 puntos base a un intervalo de 4.50% a 4.75%, el mayor registro desde 2007.
Considerado el banco central más influyente del mundo, la Fed reiteró que será adecuado continuar con los incrementos en tasas. En específico, el jefe de la institución, Jerome Powell, afirmó que el comité está evaluando dos alzas más antes de una pausa.
Después del anuncio, el mercado descuenta dos ajustes más de 25 puntos base cada uno, en marzo y mayo.
Con esto, la tasa sería de 5.25% en su parte alta del rango. Sin embargo, el viernes se publicaron los datos de empleo en Estados Unidos con la tasa de desocupación en 3.4%, su menor nivel en 54 años y también se crearon 517 mil posiciones laborales, 2.5 veces más de lo que esperaba el mercado, “lo que fue un dato muy bueno y con esto se anticipa que la Fed va a seguir subiendo su tasa de interés”, estimó la especialista.
Estos resultados llegan cuando el panorama del empleo comenzaba a mostrar signos de moderación. En opinión de Siller, la volatilidad del peso va a seguir al menos hasta marzo, dependiendo de las expectativas de lo que se espere sobre la tasa de la Fed.
“Cabe la posibilidad de que el tipo de cambio baje a niveles de 18.30 pesos por dólar, pero también (...) es posible que en uno de los picos alcance nuevamente las 19.30 unidades”, dijo.
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