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Existen dos factores detonantes que desde hace poco más de siete años, han dado paso a una nueva tendencia: las construcciones sustentables. Daniel Madariaga, experto en temas de sustentabilidad y movilidad, explicó que las exigencias de los clientes por habitar edificios ecológicos así como las normas medioambientales que poco a poco adoptan los países, son factores que estarán presentes por muchos más años.
“Es lógico que exista una parte de responsabilidad ecológica entre la sociedad. Las afectaciones al medio ambiente las vemos y padecemos todos los días. Aunque ese cambio de conciencia ha sido paulatino, será una constante en los próximos años y por ello, los ciudadanos no solo buscarán, sino que demandarán habitar construcciones ecológicamente responsables y sustentables”, explica Madariaga.
Aunque en México la actividad de construcción ecológica va en aumento, con 27% de las edificaciones actuales enfocadas a la sustentabilidad, y con expectativa al alza de 54% para 2021, serán las certificaciones las que les den la validez oficial y necesaria para ser catalogadas estrictamente como edificaciones ecológicas y sustentables.
De acuerdo con el World Green Building Council, una organización sin fines de lucro conformada por más de 70 países, para que un edificio sea considerado como ecológico, debe tener:
- Uso eficiente de recursos energéticos e hídricos.
- Contar con medidas de reducción del desperdicio y la contaminación, y permitir la reutilización y el reciclaje.
- Tener buena calidad del aire al interior.
- Y no perder de vista el entorno en cuanto a diseño, construcción y operación se refiere.
“Existen estándares mundiales a los que las constructoras y empresas deben apegarse para entregar proyectos realmente sustentables y ecológicos. Sin embargo, podemos definir aspectos como básicos para estas nuevas tendencias como el uso de la energía renovable como la solar, que sus materiales no sean tóxicos, que cuenten con diseños capaces de adaptarse al entorno cambiante y muy importante, considerar la calidad de vida que ofrecerán a sus ocupantes”, detalla Madariaga.
El experto destaca que una de las certificaciones más importantes a nivel mundial para edificaciones amigables con el medioambiente, comenzó a otorgarse en 1993 en Estados Unidos.
“Leadership in Energy & Environmental Design, conocida más comúnmente como LEED es la certificación más importante hasta el momento y se basa en la incorporación de aspectos de eficiencia energética a las construcciones, con el fin de incrementar de manera sustancial la calidad ambiental de los edificios”, explica Daniel Madariaga.
Lo valioso de la certificación LEED, radica en que puede ser aplicable en varios géneros de construcción. Ya sea para construcciones nuevas, remodelaciones, construcciones existentes mejoradas con tecnologías verdes o para el equipamiento urbano.
“LEED es básicamente un sistema con cinco categorías: sitios sustentables, ahorro e agua, energía y atmósfera, materiales y recursos y calidad ambiental en los interiores. Garantizar que las construcciones futuras en México y las existentes cuenten con todos esos aspectos, es hacia donde se tiene que enfocar la legislación ya que sin duda, será la propia sociedad la que demande espacios apegados a eso”, puntualizó.
