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Al manifestar que son “un asunto político” las consultas que solicitaron Estados Unidos y Canadá en contra de México al considerar que su política energética es violatoria del T-MEC, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que el gobierno tiene “muchísimos elementos” para responder.
Además, advirtió que habrá una defensa de su gobierno si hay alguna sanción, pues “no vamos a quedarnos con los brazos cruzados”.
En conferencia de prensa, el Jefe del Ejecutivo federal aseguró que tiene “indicios” de que esta controversia tiene que ver con “intereses creados” que se sintieron afectados porque el gobierno federal les puso un alto.
“No hay ninguna violación al tratado. Y aclarar que podemos tener relaciones comerciales, pero nuestras políticas las definimos en México y tienen que ver con nuestra Constitución y con las leyes. Por ejemplo, en el tema energético, pues nosotros no vamos a poner en negociación el dominio de la nación del pueblo de México sobre el petróleo, eso está clarísimo. El petróleo es de los mexicanos”, afirmó.
Además, afirmó que la agenda la establece el gobierno mexicano y no organismos, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial, ni algún gobierno extranjero, como en sexenios pasados.
Salazar pide seriedad
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, señaló que las diferencias en materia energética que se plantearon a través del T-MEC deben ser tratadas con seriedad.
“Debemos abordar esta disputa del T-MEC sobre energía con determinación y seriedad para una resolución expedita”, dijo a través de su cuenta de Twitter.
Recordó que el mecanismo de consulta es un elemento fundamental del tratado trilateral, ya que beneficia a los países socios para resolver estos temas con rapidez.
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