La gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador cerrará con la regularización de más de 2.5 millones de autos importados de manera informal al territorio nacional.
De marzo de 2022 al 22 de julio de 2024 suman 2 millones 406 mil autos chocolate regularizados, de acuerdo con estadísticas de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Los autos chocolate son aquellos que se importaron de Estados Unidos, Canadá o Centroamérica, cuyas versiones generalmente no se comercializan en el país o que están descontinuados porque incumplen con las normas vigentes de emisiones contaminantes.
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En febrero de 2022 se emitió un decreto que permite la regularización de este tipo de vehículos, siempre y cuando hayan sido internados al país hasta el 19 de octubre de 2021, ya sean modelo 2016 o anteriores, y que no estén reportados como robados, entre otros requisitos.
Los estados donde se permite la regularización de autos chocolate son Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Puebla, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, Tlaxcala y Zacatecas.
La AMDA indicó que 51% de la legalización de estos vehículos se concentra en tres estados: Chihuahua, Tamaulipas y Baja California. La regularización ha generado recursos por casi 6 mil millones de pesos para los gobiernos de los estados donde aplica el programa.
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El presidente ejecutivo de AMDA, Guillermo Rosales, estimó que, para el 30 de septiembre, cuando concluya el sexenio y también la disposición para regular estas unidades, se habrá rebasado la cifra de 2.5 millones de vehículos chocolate legalizados, situación que fomenta el contrabando de coches usados y contribuye a la devaluación de los vehículos que se adquirieron de manera legal en el país.
“Estamos anulando cualquier avance que hagamos en los próximos 10 años por parte de la industria y de los consumidores para modernizar el parque vehicular incorporando vehículos más eficientes, de mejor tecnología e incluso cuando estamos planteando el reto de transición de avanzar en la electromovilidad”, comentó.
La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores destacó que el objetivo del programa, que buscaba acabar con la informalidad de este tipo de unidades, no dio el resultado esperado; al contrario, siguen ingresando al país miles de vehículos de contrabando a través de la delincuencia organizada.
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“Antes del decreto, el problema se limitaba a estados fronterizos, pero ahora el país se está inundando con esas unidades de desecho hasta en entidades donde ni siquiera existían debido a que, ya emplacadas, pueden circular en cualquier parte para ser comercializadas”, dijo Rosales.
En 2005, el expresidente Vicente Fox emitió el primer decreto para importar de manera definitiva, no temporal, vehículos usados de Estados Unidos que habían internado los migrantes, pero en aquel año se importaron sólo 1.1 millones de unidades bajo ese decreto.