Entre los 30 modelos de autos más vendidos en México de 2017 a 2021 se encontró que 52% tienen pocos elementos de seguridad, no cumplen con la NOM 194 o, incluso, no pasan pruebas de choque, mostró una revisión del Instituto de Recursos Mundiales México (WRI México, por sus siglas en inglés).
A propósito de la actualización de la NOM 194 de seguridad vehicular, que entrará en vigor el próximo año, WRI aseguró que, aunque hay avances, México está rezagado en seguridad vehicular, por lo que lo ideal sería que se anexara a los acuerdos de Naciones Unidas para la Seguridad Vehicular de 1958 y 1994.
Daniel Cano, líder de proyectos en Seguridad Vial de WRI, dijo que en el país existe un doble estándar en seguridad vehicular, es decir, que la industria presenta mayor calidad para un mismo modelo si se comercializa en el hemisferio norte que si se comercializa en el hemisferio sur.
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“La organización Latin NCAP ha realizado varias pruebas de choque para evidenciar ese doble estándar. En junio de este año realizaron una prueba de choque con los dos vehículos más económicos producidos por Hyundai (Grand i10 y Accent) para el mercado mexicano y el mercado estadounidense y, si bien ambos fueron sometidos a pruebas iguales, se percibió mayor seguridad en el vehículo comercializado al norte del Río Grande”, indicó.
Cano explicó que los ahorros en equipamiento o fabricación del vehículo no siempre consisten en quitar elementos a las unidades, sino en poner los mismos, pero de menor calidad.
“La industria mexicana es tan buena, que tiene capacidad de producir vehículos con los mayores estándares de seguridad del mundo. Sin embargo, los vehículos con esos estándares no son los que se distribuyen en el mercado mexicano”, recalcó.
Bajo la lupa
Este año, la organización El Poder del Consumidor analizó las especificaciones de seguridad vehicular de 211 modelos 2021 y 2022 que representan 95% de las ventas a escala nacional, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de enero a diciembre de 2021.
El resultado fue que, de los 10 autos más vendidos en México en 2021, sólo la Toyota Hilux DC cuenta con cinco estrellas en seguridad del Programa de Evaluación de Autos Nuevos para América Latina y el Caribe (Latin NCAP), la calificación más alta en las pruebas de choque.
El March de Nissan tiene una estrella de seguridad para ocupante adulto y dos para infantil, mientras que el Beat de General Motors obtuvo cero estrellas para ambos tipos de pasajero.
Además, sólo cinco modelos —Nissan Versa, Toyota Hilux DC, Mazda 3, Nissan Sentra y Kia Forte Sedán— cuentan con Control Electrónico de Estabilidad (ESC), el cual evita derrapes y volcaduras en emergencias.
De la disponibilidad de bolsas de aire, Nissan NP 300, Aveo, Río Sedán, Vento y Forte sedán sólo incluyen dos, mientras que Versa, March y Sentra cuentan con seis, y Toyota Hilux DC y Mazda 3 cuentan con siete.
Además, la Nissan NP 300 (redilas) y March aún no disponen de un sistema de retención infantil (SRI) para cuidar la seguridad de un infante en tránsito.
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Cambio de cultura
Stephan Brodziak, coordinador de la Campaña de Seguridad Vehicular de El Poder del Consumidor, dijo que la información sobre la seguridad de los vehículos ha estado castigada en México, pero la cultura del consumidor ha ido cambiando.
“La industria se cuida mucho de lo que comercializa en el país. En 2016 fue posible una prueba de choque auto a auto de Global NCAP y Latin NCAP. Chocamos un Versa contra un Tsuru de Nissan”, recordó Brodziak.
“Un día antes, Nissan anunció que dejaría de armar el auto en mayo de 2017. También adelantaron la salida del Tsuru a la entrada de la NOM 194”.
El Tsuru tenía cero estrellas en seguridad y no pasaba pruebas de choque frontal y lateral. Sin embargo, fue el auto más vendido en el país por años.
Este año, la NOM 194 estableció como obligatorios los sistemas de seguridad como monitoreo de presión de llantas, control electrónico de estabilidad, anclajes para sistemas de retención infantil (Isofix o Latch) y el estándar de impacto lateral de poste.
Sin embargo, dejó fuera el estándar de protección a peatones, así como la implementación de la calificación de estrellas de seguridad de Latin NCAP.
Hace un par de semanas, al darse a conocer la actualización de la NOM 194, Miguel Ángel Toscano, director de Refleacciona con Responsabilidad, dijo que debido a la presión de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la normativa no considera el cumplimiento obligatorio de ningún dispositivo para la protección de usuarios vulnerables de la vía.
Esa omisión representa un riesgo para la salud y mantiene un atraso de décadas en seguridad vehicular, alertó.
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